Un mes de septiembre con numerosos récords de lluvia y calor en España
Mes húmedo en la mayoría de las regiones debido a la visita de varias DANAS. También ha sido cálido, en especial en los valores nocturnos y en su primera mitad. Veamos con detalle todas estas circunstancias.
Este septiembre que acaba de terminar ha sido un mes de transición hacia el otoño, aunque las temperaturas han sido más elevadas de lo normal, con varios récords, principalmente en su primera mitad. Las precipitaciones han sido superiores a lo habitual, aunque no en todas las regiones, con zonas del sur y del sureste de la Península o de Canarias donde ha llovido poco, mientras que en puntos del suroeste, del centro y del este peninsulares las precipitaciones han sido muy importantes.
Por decenas, la primera fue muy calurosa, con varias efemérides de temperatura, tanto máximas como mínimas, aunque no se superaron los 40 ºC en ningún observatorio. Las precipitaciones relativamente importantes, con zonas del centro y del este de la Península que ya recogieron en esos días más de lo habitual en todo el mes, mientras que en áreas del sur y del sureste peninsulares, así como en ambos archipiélagos, apenas llovía.
La segunda decena tuvo similares características, si cabe todavía fue algo más lluviosa. Nuevamente, algunos observatorios del centro y en esta ocasión del norte recibieron más lluvia que en todo el mes. Mientras tanto, las temperaturas tendieron a mostrar valores habituales para estas fechas, sobre todo con el descenso térmico que hubo entre el 19 y el 21, con las primeras heladas en los sistemas montañosos del norte de la Península.
Finalmente, el mes terminó con temperaturas algo más frescas de lo normal para estos días y con una clara estabilización del tiempo que ha supuesto que estos diez días hayan sido de los más secos de septiembre, aunque con estaciones del centro y oeste peninsulares y de Baleares que han vuelto a superar la totalidad del mes.
Temperaturas medias elevadas
Las máximas han sido ligeramente superiores a los valores habituales de este mes en casi todo el país. Las excepciones las encontramos en algunas zonas de Galicia, oeste de Castilla y León así como de Extremadura y zona centro, donde han sido ligeramente inferiores.
Con alguna irrupción del sur, junto con el dominio anticiclónico durante los últimos días del mes, los valores fueron elevados en muchas comarcas. En estaciones de AEMET, el valor más alto mensual se alcanzó en Loja, Granada, el día 7, con 39,3 ºC.
Los valores nocturnos se pueden considerar muy superiores a lo normal en la mayoría de las regiones. En estaciones de AEMET, que no son de alta montaña, el valor más bajo mensual se produjo el día 21, en Puebla de Sanabria, Zamora, con 0,3 ºC. En montaña se registró la primera helada de la temporada en la estación automática de Cap de Vaqueira, Lérida, el día 19, siendo el 21 el valor más bajo con -2,1 ºC.
En este mes se han batido numerosos récords de temperatura máxima absoluta o de temperatura mínima absoluta más altas. Nada más y nada menos que 9 observatorios de capitales de provincia superaron su valor absoluto de temperatura diurna o nocturna mensual. Para no hacer la lista interminable, podemos destacar los 38,4 ºC del día 7 en Almería aeropuerto, batiendo el que había desde 1981. En el caso de los valores nocturnos sobresalen los 21,9 ºC de Gerona aeropuerto, superando la anterior marca que era de 1987.
Precipitaciones abundantes
Mes más húmedo de lo normal si consideramos el conjunto del país, aunque con cantidades irregularmente repartidas, tanto geográficamente como temporalmente. Mientras que llovió mucho en pocas horas en puntos de las provincias de Badajoz, Huelva, Toledo, Valencia y de las Baleares, con zonas que superaron los 150 l/m2; por el contrario, en gran parte del extremo sureste peninsular y archipiélago canario prácticamente no llovió en todo el mes.
En porcentaje, ha habido zonas de las provincias de Badajoz, Madrid, Toledo, Zamora y Zaragoza, así como en Melilla, donde la precipitación ha superado el 300% de su valor normal, destacando el observatorio de Madrid Retiro, que ha llegado al 516 %. En cambio, en áreas de las provincias de Alicante y Almería, así como en parte del archipiélago canario, las lluvias han sido inferiores al 10% de lo normal.
La actividad tormentosa durante varios períodos de septiembre ha provocado chubascos muy fuertes acompañados de tormenta, de granizo y de rachas huracanadas, como el sucedido el día 23 en Cartaya, Huelva, donde el frente de racha de una tormenta dejó una velocidad máxima del viento de 121 km/h.
En este mes se han batido varios récords en observatorios principales de precipitación máxima absoluta o relativa en un día, destacando el producido en el Daroca, el día 1 con 95,2 l/m2, superando el anterior de 1932.
Consideraciones finales
Hemos empezado el otoño meteorológico, el período más húmedo del año en casi todo el país. En situación atmosférica normal, deberían seguir llegando los temporales atlánticos de lluvia, manteniéndose aún los temibles aguaceros mediterráneos, de distinta intensidad y repartidos muy desigualmente. Pero los pronósticos estacionales siguen sin ser muy halagüeños, ya que prevén precipitaciones más escasas excepto en el área mediterránea que serían normales, con temperaturas entre normales y ligeramente más altas, sobre todo en el este peninsular.
Se mantiene la situación de escasez de precipitaciones en zonas del nordeste y del sudeste peninsulares y en las Canarias, que apenas superan el 50% de su valor medio de precipitación anual total acumulada. Lo que provoca que el porcentaje de humedad del suelo sobre su capacidad máxima esté a un escasísimo 10% en grandes áreas del sureste de la Península, así como en casi todo el archipiélago canario.
Con esta situación, nuestras presas tienen un grave problema de reservas. El agua embalsada, a fecha de 28 de septiembre, es de solo el 40,32% de su capacidad máxima, un 6% inferior a la misma fecha del año pasado, y nos encontramos por debajo de la media de los diez últimos años, en este caso casi un 13%. Debemos tener mucho cuidado con el agua si no queremos entrar en un duro período de sequía.