¿Sabías que tu microbiota puede influir en tu edad biológica? Esto dicen los científicos

La microbiota intestinal siempre ha sido un indicador clave para la salud. Lo que hasta la fecha no se sabía era que de su estado depende la vejez humana. Esto es lo que los científicos han descubierto.

Imagen de la microbiota
La microbiota es un complejo ecosistema de microorganismos que habita en el sistema digestivo

La microbiota intestinal es un complejo ecosistema de microorganismos que habita en el sistema digestivo. En los últimos años ha ganado protagonismo como un indicador clave de la salud. Pero lo que pocos saben es que esta comunidad de bacterias, virus, hongos y protozoos podría tener un impacto directo en la edad biológica, la cual no siempre coincide con la edad cronológica que marca el calendario. ¿Qué relación tiene la microbiota con la edad biológica?

¿Cómo influye la microbiota en el envejecimiento?

Desde el momento en que se nace, la microbiota empieza a colonizar el cuerpo, evolucionando junto a nosotros a lo largo de la vida. Sin embargo, al igual que nosotros envejecemos, nuestra microbiota también lo hace. Factores como la dieta, el sueño, el ejercicio, la medicación y hasta aspectos culturales o geográficos influyen en su composición, y en consecuencia, en nuestra salud general.

Aún así, algunos patrones en la microbiota de personas centenarias muestran características únicas. Estos rasgos distintivos, asociados a una longevidad excepcional, sugieren que mantener un microbioma intestinal saludable podría ser clave para envejecer con calidad de vida.

Algunos estudios afirman que, mediante el análisis de la microbiota, es posible predecir la edad biológica e incluso evaluar el riesgo de mortalidad. Este vínculo estrecho entre el microbioma y el envejecimiento abre la puerta a nuevas estrategias para mejorar la salud a medida que se avanza en edad.

¿Son posibles los trasplantes de microbiota fecal?

Una de las áreas más prometedoras en este campo es el trasplante de microbiota fecal (TMF). Aunque inicialmente desarrollado para tratar infecciones severas como las causadas por clostridioides difficile, el TMF está demostrando un potencial rejuvenecedor en experimentos con animales.

Imagen de un intestino humano
Trasplantar microbiota de animales jóvenes a otros envejecidos logra revertir algunos efectos del envejecimiento

En un estudio realizado en 2021, se observó que trasplantar microbiota de animales jóvenes a otros envejecidos lograba revertir algunos efectos del envejecimiento, mejorando aspectos metabólicos, hepáticos, físicos e incluso neurocognitivos. Sin embargo, este efecto es bidireccional: cuando el trasplante se realiza de un donante envejecido a un receptor joven, los resultados son contraproducentes, con un aumento del estrés oxidativo, inflamación y problemas cognitivos en el receptor.

Mejoras en las enfermedades crónicas

Investigadores del Instituto IMDEA Alimentación, en colaboración con la Universidad Complutense de Madrid, han realizado una revisión de 92 ensayos clínicos para evaluar el uso del TMF en el contexto del envejecimiento. El 75% de estos estudios incluyó a pacientes mayores de 70 años y mostró mejoras significativas en enfermedades crónicas asociadas al envejecimiento, como sarcopenia, enfermedades neurodegenerativas y ciertos tipos de cáncer.

Sin embargo, el TMF no está exento de retos. Su uso clínico enfrenta barreras regulatorias y logísticas, que varían según el país. Mientras que en Estados Unidos está aprobado como tratamiento para infecciones específicas, en Europa su clasificación legal difiere entre países, y en algunos lugares carece de regulación.

La investigación en microbiota está apenas tiene recorrido, pero sus implicaciones podrían transformar radicalmente la forma de entender el envejecimiento y la salud en general. Porque, como dicen algunos científicos, "somos nosotros y nuestra microbiota".

Referencia de la noticia

An accurate aging clock developed from large-scale gut microbiome and human gene expression data. iScience, Volume 27, Issue 1. 2024. Gopu, Vishakh et al.