¿Qué tiempo suele hacer en Semana Santa cuando cae en marzo?
Este año la Semana Santa cae pronto, en una época en la que el tiempo suele ser muy variable con España, alterándose situaciones invernales con otras más típicas de primavera.
Este año los días grandes de la Semana Santa tendrán lugar en fechas tempranas, concretamente el Domingo de Ramos caerá el 24 de marzo y el Domingo de Resurrección el 31 de marzo. Esto se debe a que el 31 de marzo será el primer domingo tras la primera luna llena de la primavera, un criterio establecido en el Concilio de Nicea de 325 para determinar esa fecha tan especial para los cristianos.
En 2024, la primera luna llena después del 21 de marzo será el lunes 25 de marzo, y el primer domingo después de esa fecha será el 31 de marzo.
Como vemos, este año coincidirá con la recta final del mes de marzo. Son fechas relativamente tempranas si las comparamos con las de 2022 y 2023, cuando cayeron en la primera quincena del mes de abril, lo que se traduce en unos valores de temperatura o de lluvia ligeramente diferentes, y más en un país geográficamente tan complejo como el nuestro, como vamos a ver a continuación.
Ambiente más suave y gran diversidad de situaciones meteorológicas
A finales de marzo comienza a ser perceptible el aumento primaveral de las temperaturas con respecto a semanas anteriores, ya que además coincide con el cambio de hora. Pero lo más destacable es que el tiempo suele ser muy inseguro y con una atmósfera proclive a producir situaciones variables en nuestras latitudes, razón por la cual las condiciones meteorológicas pueden ser muy diversas dependiendo del día y la región.
En esos días pueden producirse episodios de lo más diversos. No son extrañas las irrupciones frías que pueden dejar nevadas importantes en las cordilleras e incluso en la Meseta, y todavía suelen llegar bastantes frentes atlánticos asociados a borrascas, aunque precisamente en esas semanas son frecuentes los descuelgues de vaguadas o danas que traen los primeros chubascos primaverales. En los últimos años tampoco han faltado eventos de calor anómalo y casi veraniego en marzo.
El tiempo de la recta final de marzo en datos
Toda falta más de un mes para que llegue la Semana Santa de este 2024, por lo que obviamente todavía no podemos saber qué tiempo hará. No obstante, a continuación vamos a ofrecer algunas estadísticas climáticas para esas fechas, pero conviene no olvidar que eso no significa que este año vaya a ser así: de hecho, como hemos comentado a finales de marzo el tiempo es extremadamente variable.
Las capitales más suaves y más frescas en la segunda quincena
En lo que respecta a las temperaturas, de acuerdo con AEMET, en Santa Cruz o Las Palmas, las capitales canarias, la media de las máximas rondan los 22-23 ºC, mientras que en la Península destacan Murcia y Sevilla, donde es habitual superar los 22 ºC en estas fechas.
En las horas centrales de finales de marzo también suelen superarse los 20 ºC en Alicante, València, Almería, Córdoba, Huelva, Badajoz o Málaga. Destinos más acordes para los que buscan temperaturas suaves. Además, en las costas del sur y del este las mínimas no suelen bajar de 10 ºC.
Para los amantes del frío, en Soria, Ávila, Burgos o León el promedio de los valores diurnos no supera los 14 ºC en la segunda parte de marzo. Precisamente en estas capitales es donde encontramos las temperaturas nocturnas más bajas, con una media que apenas supera los 2 ºC, al igual que en Salamanca o Teruel. Por tanto, no es raro que en algún día de la segunda quincena de marzo todavía pueda producirse alguna helada.
No es de los meses más lluviosos, pero los chaparrones primaverales son frecuentes
Con las precipitaciones, la cosa se complica bastante. Como ya hemos explicado, a finales de marzo el tiempo suele ser muy variable y es habitual que la inestabilidad haga acto de presencia, por lo que resulta muy complicado que no llueva ningún día de la Semana Santa en buena parte del país. Eso sí, marzo no es de los meses más lluviosos en el conjunto de España, pero los chaparrones suelen ser recurrentes, aumentando la irregularidad en la recta final.
Para el tercer mes del año la precipitación media mensual supera los 150 l/m² en el norte de Navarra y en el oeste de Galicia, sobrepasando los 100 l/m² en gran parte de la vertiente cantábrica y de Galicia, sector occidental del Pirineo, entorno de la sierra de Grazalema y en el noreste de La Palma. En cambio, oscila entre los 10-20 l/m² en zonas del valle del Ebro, sur de Valladolid, sureste de Zamora, cabo de Gata, Lanzarote y Fuerteventura.
No obstante, la media no es una buena referencia en este caso debido a la irregularidad de las precipitaciones y a la variabilidad interanual. Evidentemente con circulación de poniente los acumulados serán mayores en la vertiente atlántica, al igual que lo serían en la costa mediterránea con circulaciones de levante. Y ya si hablamos de descuelgues de aire frío, entonces no falta la lotería de los chaparrones que mantienen en vilo hasta el último momento las procesiones.