¿Qué plantas escoger para un seto perimetral? Estas son las 4 mejores opciones

Elegir las plantas adecuadas para un seto perimetral puede transformar tu jardín en un espacio funcional y estético. Descubre las 4 especies más recomendadas para cada necesidad y de esa manera sabrás más sobre este tipo de plantas.

Toma nota: te traemos las mejores opciones para levantar un seto y proporcionar privacidad a tu jardín.

El seto no solo proporciona belleza natural en un jardín, sino que también actúa como barrera natural para delimitar espacios, aportar privacidad o incluso proteger del viento. Escoger las plantas adecuadas para este propósito es esencial, y para muchas personas es un verdadero quebradero de cabeza entre la decisión de poner uno o directamente una valla no natural.

4 especies ideales para levantar un seto perimetral

A continuación, se presentan una serie de opciones para crear un seto perimetral, analizando sus características, ventajas y cuidados necesarios.

Ciprés de Leyland (Cupressocyparis leylandii)

El ciprés de Leyland es una de las elecciones más populares para setos perimetrales, especialmente cuando se busca privacidad rápida.

  • Características principales: Crecimiento rápido y denso, ideal para formar pantallas que bloquean la vista o el ruido.
  • Ventajas: Es muy resistente a plagas y tolera diversas condiciones climáticas, incluyendo el frío y la sequía moderada.
  • Cuidados: Requiere podas regulares para mantener su forma y evitar que crezca demasiado en altura.

El ciprés de Leyland es perfecto si necesitas un seto funcional y estético en poco tiempo, pero demanda cierto mantenimiento para mantenerlo compacto.

El laural es una opción segura y clásica

El laurel es una opción clásica y elegante para setos perimetrales, que combina belleza y utilidad.

Ejemplo de Laurus nobilis, más conocido como laurel

Debido a su crecimiento relativamente rápido, tiene que tener un cuidado regular a lo largo de los años para que quede perfecto.

  • Características principales: crecimiento moderado, hojas perennes de un verde brillante y aroma característico.
  • Ventajas: además de ser decorativo, el laurel es útil en la cocina, ya que sus hojas se emplean como condimento. Es resistente a enfermedades y tolera bien las podas.
  • Cuidados: necesita un riego moderado y un lugar bien iluminado, aunque tolera algo de sombra.

El laurel es ideal si buscas un seto con doble funcionalidad: decoración y utilidad.

El boj típico de zonas residenciales

El boj es la planta perfecta para setos bajos o de diseño formal. Su versatilidad permite crear formas geométricas que aportan un aire sofisticado al jardín.

El boj o Buxus sempervirens es una opción muy recomendable
  • Características principales: crecimiento lento, follaje denso y hojas pequeñas de color verde oscuro.
  • Ventajas: es muy longevo y soporta podas frecuentes, por lo que es ideal para trabajos de topiaria o setos bien definidos.
  • Cuidados: necesita suelos bien drenados y riegos moderados. Es sensible a la excesiva humedad y a ciertas plagas, como la oruga del boj.

Es ideal para setos decorativos en jardines pequeños, o como complemento de otros elementos paisajísticos.

El ciprés común (Cupressus sempervirens)

También conocido como ciprés mediterráneo, es otra excelente opción para setos perimetrales. Esta especie se ha utilizado durante siglos en paisajismo por su porte elegante y su resistencia.

  • Características principales: es una conífera de crecimiento lento a moderado, con un porte vertical muy estilizado y hojas perennes de color verde oscuro.
  • Ventajas: es extremadamente resistente a la sequía y a climas adversos, por lo que es ideal para regiones cálidas o secas. También soporta suelos pobres y es muy longevo, lo que lo convierte en una inversión a largo plazo.
  • Cuidados: necesita muy poco mantenimiento, ya que su crecimiento natural tiende a mantenerse compacto. Sin embargo, puede podarse para formar setos más densos o controlados.

El ciprés común es perfecto para quienes buscan un seto formal y de bajo mantenimiento, especialmente en zonas de clima mediterráneo. Además, su capacidad para resistir plagas y enfermedades lo convierte en una opción duradera y robusta.