¡Que no se te escape el globo!
Los globos son símbolo de celebración, aunque duran poco tiempo en nuestro evento y mucho en la naturaleza. ¿Has pensado alguna vez en las consecuencias que tiene un globo a la deriva?
¡Qué momento tan bonito! Una suelta de globos en mitad de una boda, un cumpleaños o un bautizo. Pero no, en realidad no lo es tanto. Culturalmente estamos acostumbrados a celebrar eventos con globos y, algunos de ellos, de helio. Su vida útil es muy corta, pero se mantienen en la naturaleza durante muchos años.
¿Hasta dónde asciende un globo de helio?
Primero tendremos que entender por qué flota un globo y es que su peso no es lo que determina que ascienda, sino su densidad. Un globo hinchado por nuestros pulmones se llenará de dióxido de carbono, un gas más denso que el oxígeno que nos rodea. En cambio, el helio tiene una densidad menor que la del aire. Por ello, el globo de helio asciende y el otro no.
A medida que el globo va subiendo va descendiendo la presión, lo cual hará que se expanda el helio en su interior. Cuando la presión interna del gas sea igual a la del exterior, el globo permanecerá en suspensión hasta que pierda definitivamente el helio del interior. En este caso caerá de una sola pieza al vació llegando al mar o a tierra, convirtiéndose en una trampa mortal para animales terrestres y marinos. Si por el contrario el globo estalla, se romperá en numerosos pedacitos llegando igualmente a la superficie terrestre o al mar.
Patrick Glaschke, un científico alemán, elaboró un software simulando el ascenso de un globo. Según sus cálculos, un globo puede ascender hasta 10 kilómetros, es decir el límite de la troposfera, donde tienen lugar los fenómenos meteorológicos y más o menos la altitud a la que vuelan los aviones comerciales. Además, puede permanecer en el aire durante unas 24 horas y recorrer una distancia en la horizontal de unos 3.000 kilómetros.
¿Cuánto tiempo tarda en desaparecer un globo?
Antiguamente los globos estaban hechos de vejiga de animal inflada, pero fue Michael Faraday quien en el siglo XIX creó el primer globo de látex. Lo ideó para albergar gases que utilizaba en sus estudios. El látex natural es un material biodegradable, pero cuando se le añaden químicos, plastificantes o tintes, pueden pasar meses y hasta varios años hasta que desparezcan. Un globo de poliuretano tarda hasta 450 años en desaparecer.
Los globos de aluminio no son biodegradables y pueden ser conductores de electricidad por lo que hay que evitar que se nos escapen en el exterior. De hecho, en EE.UU. deben ir por ley sujetos a un peso determinado para evitar su fuga.
La lucha contra los globos
Afortunadamente, los movimientos sociales para luchar contra el cambio climático y preservar el medio natural han ido en aumento en los últimos años y, por suerte, ha surgido uno para hacer frente a la problemática de los globos.
En Florida, se creó en el año 2011 la ONG Balloons Blow cuyo objetivo es concienciar y educar a la población acerca de los efectos negativos de los globos y su repercusión en los animales y en el medioambiente, esforzándose en inspirar y promover una conciencia de vida sostenible. Las fotografías mostradas en su web reflejan perfectamente la problemática de la suelta de globos y los efectos que tienen en la fauna.
Cómo celebrar tu próximo cumpleaños
Si has leído hasta aquí y te has concienciado acerca de este problema que quizás desconocías, no te preocupes por tu próxima fiesta de cumpleaños. Como alternativas existen globos de látex biodegradables que duran un máximo de 30 horas y tardan en desparecer unos 100 días, lo que tarda en biodegradarse una hoja de roble. También podemos utilizar pompas de jabón biodegradable, luces de colores, molinillos, guirnaldas, banderas o serpentinas.