Inaudito en este siglo, ¡llega el primer "triple episodio” de La Niña!
La Organización Meteorológica Mundial (OMM) señala que existe una alta probabilidad de que el prolongado evento de La Niña persista hasta finales de año. Si esto ocurre, sería el primer "episodio triple" de este siglo. ¿Qué efectos podría tener?
El ENSO (El Niño-Oscilación del Sur) es un fenómeno natural de variabilidad climática acoplado océano-atmósfera que se produce en la mitad oriental del Pacífico tropical. A pesar de que tiene lugar en ese sector, provoca cambios significativos en la circulación atmosférica a nivel global. Este patrón climático tiene tres fases: El Niño, neutro y La Niña.
El Niño es evento cálido del ENSO, ocurre cuando la superficie de esa zona del Pacífico se calienta más de lo habitual. Estos episodios pueden durar hasta un año, aunque el calentamiento tiende a ser más fuerte durante los meses de otoño e invierno del hemisferio norte.
La Niña es la fase fría del ENSO, y como es de suponer, ese sector del Pacífico se enfría. Los episodios de La Niña tienden a establecerse durante más tiempo que El Niño, persistiendo entre nueve meses y tres años. Entre las dos fases ocurre un periodo llamado "zona neutra", en la que ninguno de los dos eventos están notablemente activos y las temperaturas rondan el promedio.
Normalmente, la fluctuación de estos patrones suele producirse cada dos o siete años y las fases son independiente, es decir, la fuerza e intensidad de uno de ellos no repercute en el siguiente. Actualmente, estamos bajo la influencia de La Niña desde finales del año pasado, y se espera que continúe lo que queda de año.
¿Qué es la "Triple Niña"?
Las últimas previsiones señalan que existe una probabilidad del de que el actual episodio de La Niña permanezca para el periodo de septiembre a noviembre de 2022, disminuyendo la posibilidad gradualmente para los primeros meses de 2023, aunque se mantendrá alta.
Si finalmente se cumple la previsión, los expertos advierten que estaríamos ante un episodio excepcional, porque nunca antes en este siglo La Niña se había mantenido durante tres inviernos consecutivos, algo que se conoce como "episodio triple" de La Niña o "Triple Niña".
Este acontecimiento inaudito puede llevarnos a pensar que La Niña, al provocar enfriamiento, podría mitigar o reducir el calentamiento global. Pero, lamentablemente, solo ralentizará de forma transitoria el aumento de las temperaturas mundiales.
¿Cuáles serán las consecuencias en el planeta?
Recordemos, antes que nada, que este fenómeno climático de origen natural ahora se produce coincidiendo con el proceso actual de cambio climático antropogénico, provocando un aumento de las temperaturas mundiales. Los fenómenos meteorológicos y climáticos extremos se están agudizando, alterando el patrón de las temperaturas y las precipitaciones estacionales.
Es por ello, y a pesar del enfriamiento del Pacífico tropical oriental a consecuencia de La Niña, que las temperaturas de la superficie del mar están por encima de la la media en la mayor parte del planeta.
Todo ello, condicionarán el pronóstico de las temperaturas del aire para el período de septiembre a noviembre, propiciando temperaturas superiores a las normales en las zonas terrestres, en particular en bastantes regiones del hemisferio norte.
La nueva actualización de La Niña lamentablemente confirma que durante los próximos meses seguirá la devastadora sequía en el Cuerno de África, mientras que en la mitad meridional de América del Sur empeorará y afectará a millones de personas. Al mismo tiempo, se producirán precipitaciones mas cuantiosas de lo normal en Australia y en el sureste asiático, ocasionando en muchos casos importantes inundaciones.
¿Cómo podría afectar a España?
En relación a España, La Niña es un fenómeno que nos afecta de forma indirecta, y sus señales son débiles. Suele asociarse a una disminución de lluvias en nuestro país. Independientemente de este factor climático que altera la circulación atmosférica, hay que tener en cuenta otros patrones que nos afectan de manera directa, como la Oscilación del Atlántico Norte (NAO) y el vórtice polar.