Llegan los temporales otoñales, ¡las playas se preparan para resistir!
El "cordonazo de San Francisco" marca un punto de inflexión importante hacia la llegada de más frentes, borrascas y episodios de inestabilidad. También los primeros temporales, que se están adelantando en algunas zonas del litoral mediterráneo, lo que obliga a actuar en las playas.
El primer fin de semana de octubre el tiempo ha sido noticia por la llegada de un frente frío ha abierto las puertas a una masa de aire mucho más fresca y a un comportamiento de la corriente en chorro más dinámico. Esa cinta transportadora de aire en capas altas ha bajado más de latitud, como suele ser habitual para estas fechas, lo que ayuda a generar borrascas con más facilidad y probabilidad.
Los últimos octubres han sido secos, pero hay excepciones
Octubre suele traer importantes temporales en la vertiente mediterránea, con precipitaciones abundantes, aguaceros e incluso inundaciones. Descuelgues de aire frío en altura, vientos cargados de humedad y un mar caldeado es la combinación perfecta para que llueva a cántaros en bastantes puntos del país, especialmente en el este y Baleares.
A pesar de ello, los octubres de la última década han estado caracterizados por un tiempo cálido y seco en España. Solo encontramos algunas excepciones en puntos del litoral mediterráneo, especialmente en los años 2018 y 2019, con acumulados de lluvia claramente superiores a los habituales para las fechas.
Es el caso de Cataluña y las Islas Baleares. En concreto, en la comunidad catalana octubre tuvo un carácter húmedo o muy húmedo durante los años 2010, 2011, 2012, 2016 y 2017; mientras que en otros puntos de la mitad este últimamente octubre ha quedado relegado a un segundo plano en lo que respecta a la pluviometría.
Por este motivo, el Área Metropolitana de Barcelona (AMB), como administración gestora de las playas situadas entre Montgat y Castelldefels, ha observado un incremento de los temporales 'prematuros' en septiembre y octubre, lo que obliga a llevar a cabo una serie de actuaciones.
Preparar las playas ante temporales que se adelantan cada vez más
Esos temporales más prematuros han hecho cambiar la planificación en la retirada y preparación de las playas metropolitanas en dos ejes principales: el calendario y la ordenación espacial de los equipamientos.
En primer lugar, las tareas de desmontaje se han avanzado quince días. Hace unos años empezaban a principios de octubre, mientras que en esta temporada lo han hecho a mediados de septiembre.
En segundo lugar, la reordenación espacial consiste en dejar la primera mitad de la playa más próxima a la orilla totalmente desnuda de mobiliario e instalaciones, con el objetivo de disminuir la vulnerabilidad y la exposición de estos elementos ante posibles temporales. Vendría a ser como una franja de protección que corresponde a la parte más dinámica de las playas, donde el oleaje incide de una forma más directa y brusca.
De acuerdo con el HRES-IFS, nuestro modelo meteorológico de referencia, a largo plazo las altas presiones podrían reforzarse en el entorno de las Británicas, lo que provocaría, efectivamente, un empeoramiento de la situación marítima en las costas mediterráneas debido al predominio de los vientos de levante.