¿Por qué estas semanas son las más frías del año en España?
Enero es el primer mes del año y el elegido por excelencia el mes más frío del invierno en España. Son varias las razones, aquí te contamos por qué se lleva ese mérito.
No cabe duda que la temporada más fría en España ocurre durante alguno de los tres meses invernales, pero claro, afirmar esto es demasiado fácil e impreciso. Analizando los datos históricos sí podemos ir más allá y ajustar la mirilla: se suele dar en enero. El refranero meteorológico así lo afirma y algunas citas, al igual que la estadística -que es lo que nos debe ocupar-, describen perfectamente que el primer mes del calendario se lleva el gran premio. La cuestión es, ¿por qué?
El mes más frío del año
Según AEMET, la temperatura media del mes de enero para la parte de España peninsular es de 5,7 ºC teniendo en cuenta el período de referencia de 1981 al 2010. Si añadimos en este grupo las Islas Baleares y las Islas Canarias, la media sube algo más, concretamente a 8,4 ºC. Esto ocurre porque las latitudes en las que se ubican las Islas Canarias son más meridionales y las Islas Baleares tienen influencia termorreguladora del agua del mar.
Si miramos la temperatura media de los meses invernales vemos que enero es, con diferencia, el mes más frío. En diciembre, la temperatura media es de 6,6 ºC, en febrero 7 ºC y en marzo 9,8 ºC. Esto suele ser una constante, contando únicamente la parte de la Península, pero vayamos más allá.
¿Por qué en su segunda quincena se dan las temperaturas más bajas en España?
Según los datos facilitados por AEMET, la segunda quincena del mes de enero suele ser el momento más frío del año, aunque con muy poca diferencia respecto a la primera. Concretamente, atendiendo a los datos históricos de temperatura media, el día más frío se sitúa el 21 de enero.
Esto tiene su explicación. Por un lado, la temperatura del mar cada vez es más baja, d e hecho, aún se está enfriando y suele ser febrero el mes más frío en el Mediterráneo. Y, por otro, aunque los días se vayan alargando y ganemos una hora de sol durante el mes, la radiación solar que recibimos aún no tiene la energía suficiente como para atemperar de forma notable el ambiente.
También, otro factor es que durante esta época del año la circulación zonal se intensifica pero ¿qué quiere decir? Esto se traduce en que el anticiclón típico de enero tiene vía libre para situarse en nuestras latitudes y quedarse un largo tiempo entre nosotros. Esto suele provocar frío, noches gélidas e inversión térmica, aunque a menudo nos encontremos con el sol llegado el mediodía.
Olas de frío, las masas de aire culpables
Es típico también de este mes que el anticiclón, en ocasiones puntuales, se mueva hacia el norte y el oeste, abriendo pasillo a masas de aire de origen más septentrional que provocan las nevadas y olas de frío en España.
En este grupo encontramos la masa de aire polar marítimo (Pm) que suele ser bastante fría y húmeda, provocando lluvia y nieve en los principales sistemas montañosos. Luego está la masa de aire polar continental (Pc), seca y fría pero que si pasa por el Mediterráneo se vuelve más húmeda. Y finalmente, la masa de aire ártica marítima o continental (Am y Ac) que es fría y húmeda en la Cordillera Cantábrica y Pirineos, en el resto más seca.
Tampoco hay que olvidarnos de las propias situaciones anticiclónicas. Estas también suelen dejar heladas y situaciones de mucho frío. Por ejemplo, la escarcha, el rocío blanco y la cencellada son hidrometeoros que suelen formarse en las temporadas anticiclónicas e invernales con temperaturas inferiores a los 0 ºC.