¿Por qué esta ola de calor será la más peligrosa del año?
Solo hace tres días que el verano está aquí y el anuncio de la primera ola de calor no ha tardado en llegar. Toca extremar las precauciones porque será la peor ola de calor del año. ¿Por qué?
Pocas veces una ola de calor es tan madrugadora. El viernes a las 17:54 llegaba el verano de forma oficial y apenas hemos tenido tres días de calma. Los mapas ya nos indican la llegada del calor procedente del norte de África que dejará unos valores suficientemente altos para hablar del fenómeno más peligroso del verano.
España no es el único país pendiente de este calor. Si se cumplen los pronósticos, hasta en el centro de Europa se alcanzarán temperaturas entre los 35 y los 40 grados. Incluso si queremos escaparnos al norte continental, como a las Islas Británicas, llegaremos a los 30. ¿Por qué es tan peligroso?
El calor repentino, el peor
El cuerpo humano no está preparado para aguantar cambios de temperatura tan repentinos. Una buena prueba de ello lo tenemos en invierno. Al salir de casa con la calefacción puesta a la calle, sufrimos. Lo mismo ocurre en verano. Cuando abandonamos el aire acondicionado de casa y nos plantamos en la calle a 40 grados, podemos llegar a marearnos.
Los cambios de temperatura al paso de cada estación del año son mucho más suaves. El cuerpo se va acostumbrando a la llegada del frío o del calor y se adapta tirando de sus mecanismos como sudar en verano o temblar en invierno en el caso más extremo.
Cuando el calor llega de la forma en la que va a llegar esta semana, el peligro se multiplica. El cuerpo no ha tenido tiempo de adaptarse a las altas temperaturas del verano. Si el calor fuera llegando día tras día, sin que nosotros nos diéramos cuenta, el cuerpo se acostumbra. Ocurre lo mismo que con el sueño. Cuando toca madrugar el primer día de la semana nos cuesta, pero a medida que pasan los días nos acostumbramos. Por este motivo la primera ola de calor del verano siempre es la más peligrosa.
Un riesgo que nos puede matar
La gente sana lo pasará mal, pero tomará medidas para hacer el calor más llevadero. No saldremos a las horas de más calor, caminaremos por la sombra, no haremos comidas copiosas, buscaremos siempre el aire acondicionado o una zona fresca y nos hidrataremos a menudo.
Pero hay muchas personas que corren un riesgo real, de incluso encontrarse con la muerte, debido a problemas de salud, por ser mayores, trabajadores al aire libre o niños pequeños. La deshidratación es el principal riesgo, ya sea por la actividad o por el olvido.
Cada año mueren miles de personas por las altas temperaturas en todo el continente. Muchos recordamos la ola de calor de 2003 en la que fallecieron 52.000 personas en Europa. Solo en Francia fueron 15.000. Si la previsión se cumple, esta semana no nos vamos a quedar muy lejos de las temperaturas que se alcanzaron en 2003.
Noches sin descanso
El otro factor que tendremos que confirmar será el de la duración de la ola de calor. Y no solo por el calor extremo que se sufrirá de día, sino también el que tocará aguantar por la noche.
Si todo sigue así, las famosas noches tropicales, en las que cuesta conciliar el sueño, nos van a acompañar esta semana. Si son puntuales, el cuerpo puede soportarlas. Solo iremos algo más cansados durante el día. El problema viene cuando una ola de calor se alarga y nos pasamos muchas noches sin dormir bien. El cansancio se irá acumulando.