Gran descubrimiento: crean oxígeno a partir del polvo lunar
Motivados por la idea de establecer colonias humanas en la Luna, la Agencia Espacial Europea descubrió cómo transformar el polvo lunar en oxígeno. Descubre el método, mientras te imaginas en tus futuras vacaciones lunares.
En la Agencia Espacial Europea (ESA por sus siglas en inglés), un grupo de investigadores del Laboratorio de Materiales y Componentes Eléctricos del Centro Europeo de Investigación y Tecnología Espacial (ESTEC), acaba de hallar la manera de transformar el polvo lunar en oxígeno. Este es un avance muy valioso, porque así podrían facilitar la obtención de un recurso vital en nuestro satélite natural.
La directora de esta investigación científica, Beth Lomax de la Universidad de Glasgow, explica que este oxígeno generado no sólo va a poder ser utilizado para que los humanos respiren, sino que también servirá para “producir combustible para los cohetes, que está basado en el hidrógeno y el oxígeno”.
Los investigadores establecieron una pequeña planta experimental de oxígeno en la sede de ESTEC, en Noordwijk, Países Bajos. Hasta ahora trabajaron con regolito lunar simulado -que cuenta con la misma composición-, porque el real es muy preciado y se conserva para otro tipo de estudios.
El investigador de la ESA, Alexandre Meurisse, anuncia: ”ahora que tenemos la instalación en funcionamiento, podemos analizar cómo ajustarla, por ejemplo, reduciendo la temperatura de funcionamiento, y eventualmente diseñando una versión de este sistema que algún día podría volar a la Luna para ser operado allí".
Lo que esconde el polvo lunar
La superficie lunar está cubierta por una capa (de varios metros de profundidad) de un material llamado regolito. Se trata de un fino polvo lunar, cuya génesis se sitúa en los múltiples impactos de micrometeoritos, que se fue acumulando en la superficie a lo largo de miles de millones de años.
Durante el programa Apolo, se logró investigar que el regolito está compuesto en un 40 a 45% por oxígeno. Por supuesto no está libre para su uso inmediato, sino que permanece unido químicamente como óxidos a otros compuestos, y forma minerales o cristales. Además, se sabe que el regolito es muy abrasivo y puede dañar el sistema respiratorio.
El método
El proceso utilizado por ESTEC se llama “derretimiento por electrólisis salina”. Consiste en colocar el regolito dentro de un recipiente metálico, junto con una sal de cloruro de calcio que funciona como electrolito. Después se calienta hasta alcanzar una temperatura de 950 °C, un paso donde el regolito permanece en estado sólido, pero al pasar una corriente a través de la sal, el oxígeno se libera del polvo y migra a través de las sales hasta un ánodo, donde se puede extraer.
Otro subproducto de este proceso es el polvo convertido en una aleación metálica usable. De hecho, Beth se doctoró trabajando para la compañía británica Metalysis, donde estudió este proceso de electrólisis salina para la producción comercial de metales y aleaciones. Para esta empresa el oxígeno era un subproducto no deseado, liberándose entonces como dióxido y monóxido de carbono. “Los reactores no están diseñados para soportar el gas oxígeno”, explica Beth.
En el Laboratorio de la ESA, lo que hicieron fue adaptar el proceso para que trabaje sobre polvo lunar y obtener un oxígeno más adecuado rediseñando el método. En cualquier caso los científicos de ESTEC indican que “todavía hay algunas cosas por resolver”, por ejemplo rebajar la temperatura media de los procesos.
Paso siguiente
Meurisse explica que además de lo que logran con el oxígeno, se abre con este método otra línea de investigación. Se podrá estudiar las aleaciones resultantes, y analizar su utilidad. Por ejemplo, él propone “refinarlos o no para el uso de impresión 3D”.
El diseño de ESTEC aún está en proceso de perfeccionamiento, por el momento el oxígeno se logra producir a través del polvo lunar pero escapa por un tubo. El proyecto a corto plazo es lograr almacenarlo, y así en un futuro no tan lejano (estiman una demostración para mediados de esta década), se pueda lograr instalar una planta de operación sostenible en la Luna.