Noviembre 2021 en España: cambios de tiempo radicales, aquí el balance
Nuevamente hemos tenido un mes con dos caras muy marcadas, las primeras tres semanas y la final. Ha sido frío en general y seco al principio, pero extremadamente húmedo al final. Veamos con detalle lo sucedido durante este mes.
Los primeros días de noviembre tuvieron los últimos coletazos de la inestabilidad de octubre y temperaturas más altas de lo normal, incluso con algún récord en las mínimas. Las lluvias iban por un camino de escasez, pero durante los últimos días del mes, las importantes precipitaciones, principalmente en el área cantábrica, lo han llevado a la casi normalidad en la media nacional.
Por decenas, la primera fue normal en las temperaturas, con máximas más altas pero con las mínimas inferiores y con precipitaciones algo escasas, excepto en las islas Baleares, donde las lluvias ya superaron lo normal para todo el mes, debido a la presencia de la borrasca de gran impacto Blas.
La segunda decena tuvo similares características, si cabe todavía fue algo más seca, excepto en las Baleares; mientras, las temperaturas diurnas se mantuvieron algo altas por la ausencia de nubosidad debida al anticiclón y que, a su vez, hizo que las mínimas fueran más bajas de lo normal.
Finalmente, el mes ha terminado con un cambio radical en las condiciones meteorológicas, en especial en el tercio norte peninsular y en algunas islas del archipiélago canario, con precipitaciones muy por encima de la media. Los valores termométricos han sido claramente más bajos que los normales en todas las regiones.
Temperaturas medias inferiores a lo normal
Las temperaturas máximas han sido inferiores a los valores habituales de este mes en casi todo el país. Las excepciones las encontramos, solamente, en el suroeste de Galicia, donde han sido superiores.
Aún con el dominio anticiclónico durante muchos días del mes, el cambio del tiempo en la última decena ha podido con el Sol otoñal dejando estas temperaturas bajas. En estaciones de AEMET, el valor más alto mensual se alcanzó en la localidad murciana de Águilas el día 1, con 31,0 ºC.
Los valores nocturnos han sido inferiores a lo normal en la mayoría de las regiones, salvo en zonas del levante que han sido más altas y de Canarias, muy cercanas a la normalidad. En estaciones de AEMET, que no son de alta montaña, el dato más bajo mensual se produjo el día 18, en Morón de Almazán (Soria), con -7,2 ºC. En nuestros sistemas montañosos los valores han descendido de manera importante, con un mínima nacional en las estaciones del Pirineo leridano de Cap de Vaqueira y de Port Ainé de -13,0 ºC el día 28.
En este mes se han batido algunos récords de temperatura máxima absoluta más baja y de mínima absoluta más alta. El primero de los casos se produjo el día 26 en el aeropuerto de Lanzarote, con 17,5 ºC; para el segundo podemos destacar el registrado el día 1 en el observatorio de Cádiz, con 20,7 ºC, es decir, una noche tropical en pleno otoño.
Precipitaciones en la media
Mes casi normal si consideramos el conjunto del país, aunque con cantidades irregularmente repartidas, tanto geográficamente como temporalmente. Mientras que ha llovido mucho en pocas horas y en pocos días en casi toda la cornisa cantábrica, en las Baleares y en la isla de La Palma, con áreas que han rondado los 500 l/m2; por el contrario, en zonas del extremo occidental peninsular, áreas de las provincias de Toledo, Murcia, Almería, Granada, Málaga y Sevilla, así como en las islas más orientales del archipiélago canario, las precipitaciones han sido inferiores a 10 l/m2.
En porcentaje, ha habido zonas de las provincias de Asturias, Cantabria, Navarra, Zaragoza, Tarragona y Alicante, así como casi todo el archipiélago balear, donde la precipitación ha superado el 300% de su valor normal, destacando el observatorio de Palma de Mallorca, que ha llegado al 458%. En cambio, en muchos puntos de los extremos occidental y meridional de la Península, así como en parte del archipiélago canario, las lluvias han sido inferiores al 25% de lo normal.
En este mes se ha batido el récord de precipitación máxima absoluta en un día en el observatorio de Tortosa, el día 22 con 125,0 l/m2, superando el anterior de 1971.
Consideraciones finales
Ya hemos pasado la mitad del otoño meteorológico, que es el período más húmedo del año en casi todo el país. En situación atmosférica normal, aún podría llegar algún temporal atlántico de lluvia, casi desaparecer los temibles aguaceros mediterráneos y todo ser sustituido por las irrupciones frías del norte y noroeste, además del anticiclón clásico del período invernal. Parece que esta vez los pronósticos para las próximas semanas sí dan precipitaciones ligeramente más elevadas que las normales en casi todas las regiones.
Se mantiene la situación de escasez de precipitaciones en áreas del extremo sur peninsular y en las Canarias, que apenas rondan el 25% de su valor medio de precipitación anual total acumulada. Lo que provoca que el porcentaje de humedad del suelo sobre su capacidad máxima esté a un escasísimo 10% en comarcas de las zonas anteriormente citadas.
Con esta situación, nuestras presas continúan con el grave problema de reservas, el agua embalsada, a fecha de 30 de noviembre, es de solo el 39,19% de su capacidad máxima, un 7% inferior a la misma fecha del año pasado y nos encontramos por debajo de la media de los diez últimos años, en este caso algo más de un 14%.