¿Nos quedaremos sin otoños y sin primaveras?
Cada año tenemos la sensación de que pasamos directamente del calor al frío, saltándonos el otoño. Y de la misma forma, pasamos del frío al calor sin disfrutar de la primavera. ¿Es esto cierto?
Una vez más en ascensores, mercados y cafeterías el tiempo vuelve a ser el tema de conversación por el mismo motivo: "el frío ha llegado de repente". ¡Qué barbaridad! No deja de ser cierto, claro. Acto seguido, el debate sigue con eso de que “cada año el otoño dura menos”. Hoy vamos a analizar si esta sensación es cierta o no lo es.
El mejor clima para el cuerpo humano
El calor asfixiante del verano y el frío riguroso del invierno nos hacen sentir incómodos. Nuestro cuerpo no está preparado para soportar temperaturas tan extremas. En verano usamos aires acondicionados y ropa ligera, y en invierno, nos tenemos que abrigar de pies a cabeza. Los humanos somos los únicos que lo hacemos.
Tanto el otoño como la primavera son estaciones de transición entre ambos tiempos tan extremos. Y es en estas dos épocas cuando el ser humano disfruta del máximo confort térmico. Las noches no son muy frías, y durante el día el calor no aprieta demasiado. ¿Se están reduciendo estas dos estaciones?
Sensación o realidad
Efectivamente, los estudios nos indican que tenemos razón. Tanto la primavera como el otoño se están viendo recortados en número de días. El principal motivo es que el verano es cada vez más largo. Tocará acostumbrarse a este cambio en el clima.
Hay un estudio reciente que nos lo confirma. El meteorólogo de AEMET César Rodríguez Ballesteros publicó a finales de julio un análisis de cómo el verano se ha alargado en España. El resultado es el siguiente: cada 10 años el verano se está adelantando 7,01 días y se está prolongando 9,23. Los perjudicados: primavera y otoño.
Pueden parecer pocos días, pero estamos hablando de 10 años. ¿Qué puede pasar dentro de 100 años? Si esto sigue así, un adelanto de 70,1 días y una prolongación de 92,3. Datos que ya ponen la piel de gallina.
En cuanto al invierno, faltaría un estudio minucioso igual que el del verano. Por el momento podemos decir que las temperaturas, invierno tras invierno, son cada vez menos frías.
Los cambios de armario, afectados
Hay pocas cosas que preocupen más en alguna época del año como el famoso cambio de armario. Los más coquetos saben que hay un armario para verano, otro para entretiempo y el de invierno. Cada año los meteorólogos nos sentimos bombardeados con la pregunta de si debemos o no hacer ya el cambio de armario. Una gran responsabilidad. Viendo cómo evoluciona el clima quizá lo tendremos cada vez más fácil.
Ahora que tocamos el tema del armario, un pequeño inciso que se merece una entrada aparte. El nuevo comportamiento de las temperaturas durante el año afectará de forma inevitable a las grandes marcas de ropa. En moda la planificación es básica y el momento oportuno para presentar una nueva temporada cambiará con el paso de los años.