No estamos solos: los animales también se automedican

Aunque no está científicamente comprobado, todo indica que los humanos no somos lo únicos que nos automedicamos. Algunos animales parecen entender las propiedades medicinales de algunas plantas: descubre cuáles son.

Chimpancés
Todo parece indicar que el chimpancé se automedica, y lo hace porque lo ha aprendido socialmente, ya que los chimpancés jóvenes imitan a los mayores.

Se conoce como zoofarmacognosia, y no es otra cosa que es el estudio multidisciplinario del comportamiento de los animales que utilizan plantas, minerales e incluso otros animales para automedicarse. Aquí vamos a analizar algunos de los casos más sorprendentes del reino animal.

Chimpancés, elefantes y mariposas: los sorprendentes "doctores" del reino animal

Si bien es algo que la ciencia aún no ha podido demostrar, y pese a ser algo que se asocia comúnmente con los seres humanos, todos los indicios apuntan a ello: los animales tienen sus propios "remedios caseros" para tratar enfermedades. Y no es uno solo, sino diferentes especies animales.

Tratamientos contra parásitos de los chimpancés

Que el chimpancé es un animal extremadamente inteligente es sabido por todos, pero quizá no tanto que tiene un conocimiento de la automedicación particularmente impresionante, y es a base de plantas.

Los chimpancés no mastican las hojas, sino que las tragan enteras para que sus texturas rugosas raspen los intestinos y eliminen los parásitos.

En África, diferentes investigadores han observado que estos primates se automedican para eliminar parásitos intestinales. Un ejemplo claro de ello es que consumen hojas rugosas del género Aspilia, plantas que ni son nutritivas ni tienen valor alimenticio para los chimpancés, pero en cambio sí contienen propiedades antiparasitarias.

Además también mastican las hojas de Vernonia amygdalina, una planta amarga con propiedades antibacterianas y antiparasitarias, que ayuda a combatir infecciones intestinales. Y lo que se ha podido documentar es que sólo las usan cuando están enfermos, lo que parece reforzar la idea de que comprenden sus propiedades medicinales.

Desencadenante del parto en los elefantes

Otro de los animales que recurre a la automedicación en momentos específicos es el elefante. Sin ir más lejos, en África, las hembras embarazadas han sido observadas comiendo ciertas plantas con propiedades oxitócicas que ayudan a inducir el parto. Uno de estos ejemplos es la ingesta de la corteza de ciertos árboles, como el Boraginaceae.

Este comportamiento lo pudieron comprobar por primera vez los campesinos locales, y luego fue confirmado por biólogos, quienes notaron que los elefantes solo consumen estas plantas en las últimas etapas del embarazo, lo que sugiere que conocen su efecto en la aceleración del trabajo de parto.

Mariposas monarcas, el ingenioso escudo natural contra los parásitos

Otro animal que parece automedicarse es la mariposa monarca. Y es que las orugas de esta especie se alimentan de plantas del género Asclepias, conocidas comúnmente como algodoncillo o "milkweed", que contienen compuestos tóxicos llamados cardenólidos.

Mariposa monarca
Los compuestos de las plantas que consumen estas mariposas, además de hacerlas venenosas para sus depredadores, les ayudan a combatir ciertos parásitos.

Las mariposas monarcas hembras infectadas con el parásito Ophryocystis elektroscirrha eligen plantas de algodoncillo con más toxinas para depositar sus huevos, lo que protege a las orugas de los efectos del parásito.

El secreto de la desintoxicación natural del loro con arcilla

En las selvas de América del Sur se ha observado a loros y otras aves de la familia de los psitácidos participando en un comportamiento curioso: comer tierra o arcilla. Este comportamiento, conocido como geofagia, ayuda a los loros a neutralizar las toxinas presentes en algunas de las semillas y frutas que consumen. La arcilla tiene propiedades que absorben las toxinas y las eliminan del cuerpo de las aves antes de que puedan causar daño.

Lo curioso es que diferentes investigadores han demostrado que los loros que comen ciertas plantas venenosas también ingieren más arcilla, lo que sugiere que comprenden el efecto desintoxicante de este mineral. Además, la arcilla también proporciona a las aves minerales esenciales que son escasos en su dieta.