No es niebla, es polvo del Sáhara que se nos ha echado encima
Hoy el cielo está presentando un aspecto blanquecino en muchas zonas del sureste peninsular y Baleares. ¿Cómo ha llegado hasta nosotros el polvo saharino? Barbara tiene parte de culpa, no toda.
Gran parte del litoral sureste peninsular y Baleares han amanecido hoy con el paisaje velado por una extraña neblina de color blanquecino. Tras esta bruma está una miríada de partículas de polvo en suspensión que han sido transportadas por el viento desde el Sáhara. La concentración es tal que se puede observar en el satélite visible, en este preciso instante trasladándose sobre el Mediterráneo con dirección a Baleares. La borrasca Barbara ayer abrió un pasillo al viento de componente suroeste que hoy sigue vigente, apuntalado por la vaguada que hay frente a las costas de Portugal.
Este flujo, además del polvo en suspensión, está inyectando una masa de aire cálido de origen subtropical que ha incrementado las temperaturas sobre todo a orillas del Mediterráneo, tanto las máximas como las mínimas. Además, provocará en las próximas horas un pronunciado descenso de los niveles de humedad en el interior de Murcia, la Comunidad Valenciana y el Valle del Ebro, con valores inferiores al 30 %. La mitad oeste peninsular y Canarias quedarán fuera de esta invasión de aire continental.
Mañana continuará predominando el viento del sur en las capas medias y bajas de la troposfera, aunque las temperaturas descenderán en el este de la Península Ibérica y Baleares debido a la llegada de mayor nubosidad, que podría dejar en estas regiones algunos chubascos débiles acompañados de barro. En la jornada del viernes las temperaturas empezarán a bajar en gran parte del país de forma clara, especialmente las mínimas. No tanto a orillas del Mediterráneo, porque el refrescamiento será provocado por el viento del oeste que en estas zonas llega recalentado como consecuencia del efecto foehn.
El polvo en suspensión en números
Según el modelo europeo, hoy habrá una concentración media de entre 10 y 20 microgramos por metro cúbico (µg/m3) en Murcia, Comunidad Valenciana, Cataluña y Baleares. Esto provocará que las partículas PM10 ronden los 30 µg/m3 de media diaria en el litoral de Alicante, así como en gran parte del litoral y prelitoral de Cataluña y Baleares. En Barcelona llegará hasta los 40 µg/m3, al límite de lo considerado perjudicial para la salud (50).
Mañana se mantendrá la situación en la Comunidad Valenciana y Barcelona, pero aumentará la concentración en Baleares. Al sur de Mallorca y de Menorca podría llegar a los 30 µg/m3. Por tanto, la situación con las PM10 también se agravará en el archipiélago balear, con concentraciones de 40 µg/m3 en el este de Mallorca y en Menorca. Serán altas pero también muy fugaces, porque el viernes ya se retirarán hacia el interior del Mediterráneo.
¿Qué son las PM10?
Las PM10 se definen como partículas sólidas o líquidas de polvo, cenizas, hollín, cemento o polen que están dispersas en la atmósfera con un diámetro que varía entre 2,5 y 10 µm (1 micrómetro es la milésima parte de 1 milímetro). Gran parte de ellas proceden del polvo suspendido en la atmósfera, pero también contribuyen la industria, la construcción y el comercio.
Las PM10 quedan retenidas en la mucosa que recubre las vías respiratorias superiores, agudizando en algunos casos -más extremos- enfermedades como el asma. Cuando la concentración de estas partículas es muy elevada las autoridades sanitarias recomiendan no llevar a cabo ejercicios físicos al aire libre, permanecer en lugares interiores y utilizar mascarilla en caso de percibir molestias. Esto último ahora no debería ser un problema.