Encuentran una criatura parecida a una “sirena” en la costa de Papúa Nueva Guinea. Esto piensan los científicos
El pasado mes de septiembre apareció en una playa de Papúa Nueva Guinea una criatura con una estructura muy similar a la de una sirena. Hay muchas discrepacias entre los expertos, estas son sus teorías.
El pasado mes de septiembre, una extraña criatura fue encontrada por residentes de la isla Simberi, una pequeña isla volcánica en el mar de Bismarck, en la provincia de Nueva Irlanda en Papúa Nueva Guinea, según información proporcionada por The Science Times.
Según la creencia popular, esta criatura se parecía a una sirena, sin embargo, los expertos creen que se trataba de un mamífero acuático. Este mamífero acuático podría haber sido una ballena, un delfín, una vaca marina o incluso un tiburón. Sin embargo, debido a su avanzado estado de descomposición, ya que le faltaba la mayor parte del cráneo, así como grandes porciones de piel, fue enterrado por los habitantes y no se pudo averiguar su identidad.
Las diversas teorías de la comunidad científica
Según la comunidad científica, se trató de un “globster” que llegó a la orilla, es decir, una masa orgánica no identificada. Se denomina así por su difícil identificación, al menos para observadores iniciales no capacitados, y porque genera controversia respecto a su identidad. Puede ser una criatura parecida a una masa sin ojos, huesos o una cabeza visiblemente distinta.
"La acumulación de gas en el interior de la cavidad corporal provoca hinchazón y distorsión. Varias partes se desprenden o son recogidas por los tiburones mientras flotan", explica Ivan Terence Sanderson, biólogo británico que acuñó el término en 1962 para describir una extraña criatura australiana con forma de burbuja.
Erich Hoyt, investigador de la organización benéfica británica Whale and Dolphin Conservation, y Jens Currie, científico jefe de la Pacific Whale Foundation en Hawaii, sugirieron que la criatura era un dugongo (vaca marina) muerto hace mucho tiempo, siendo el animal muy común en aguas poco profundas cercanas a la isla Simberi. Además, los científicos también pensaron que la cantidad de grasa era un indicio de que se trataba de un mamífero marino y no de un tiburón.
Sascha Hooker, especialista en mamíferos marinos de la Universidad de St Andrews, Escocia, tiene una opinión diferente. En su opinión, se trataba de un cetáceo muy descompuesto, lo que hace pensar que podría tratarse de una ballena o un delfín.
A pesar de todas las sospechas, aún no se han avistado las criaturas híbridas que aparecen en las leyendas e historias del mar, representadas en la mitología griega.