Más de 500 tornados reportados en Europa a lo largo de 2018
El mapa de reportes de tornado del 'European Severe Storms Laboratory' muestra cerca de 600 informes, más de 500 pertenecientes a Europa. Todos en 2018.
A lo largo de 2018 el European Severe Storms Laboratory (ESSL) ha recogido más de 500 reportes de tornado procedentes de toda Europa. La zona mediterránea ha sido de sobra la más activa, concentrando numerosos vórtices a finales de otoño entre Italia y el sureste de Francia. En nuestro país, como ocurre habitualmente, la mayor densidad de torbellinos se ha observado en áreas de costa. Aquí se han hecho 50 reportes relacionados, en general, con trombas marinas no vinculadas a tormentas con rotación, las temidas supercélulas.
Los casos más llamativos
El Día de Reyes deparó a media mañana en El Ejido, Almería, potentes tormentas que generaron uno o varios tornados. No se reportaron daños personales pero sí materiales, pues afectaron zonas de cultivo repletas de invernaderos que fueron despedazados por el vendaval.
El 12 de marzo un torbellino saltó a la primera plana informativa desde Caserta, en el sur de Italia. En plena noche, un tornado cruzó varias localidades: San Nicola la Strada, Marcianise o Macerata. A su paso dañó techos de edificios, arrancó árboles y volcó coches. Al menos 15 personas resultaron heridas.
El distrito de Nicosia, en Chipre, el 21 de octubre probablemente registró el tornado más espectacular del año en terreno europeo. Sin ser excesivamente potente, el vórtice levantó una gran polvareda que le otorgó un cuerpo monstruoso. Dejó daños materiales cuantiosos pero no personales. Casi un mes más tarde, el 20 de noviembre, la localidad italiana de Cutro acaparó los informativos debido al paso de un tornado sobre un tren. Dos personas resultaron heridas y el convoy registró numerosos daños (más datos en severe-weather.eu).
Son más habituales de lo que parece
En el año 2014 Pieter Groenemeijer y Thilo Kühne, investigadores del ESSL, publicaron un nutrido estudio con centenares de reportes de tornado, algunos de ellos de principios del siglo XIX. Desde entonces se han notificado de forma regular torbellinos en todos los países de Europa. Hasta el momento, el año 2006 se erige como el más prolífico en reportes, con 680 informes.
Tras procesar todos los datos, los científicos alemanes constataron que los tornados tienen un claro máximo en verano, sobre todo en julio, y el mínimo en diciembre. En los eventos de trombas marinas el ciclo se retrasa un poco. Muestran mayor número en agosto y menor en marzo, probablemente porque la temperatura del mar en sus picos lleva cierto retraso respecto al aire. De los últimos dos siglos se extrae que, aproximadamente, fallecen 4 personas por año a causa de estos fenómenos en Europa.
En España, según el estudio de ‘Climatología de tornados’ de la AEMET, la media anual de torbellinos se sitúa en unos 22 dentro de la muestra estudiada, que abarca diez años entre 2003 y 2012. En cuanto a su distribución mensual, la máxima activad corresponde al final de verano y en otoño, una constante en los países bañados por el Mediterráneo. Las zonas con más riesgo de padecerlos son la costa oriental peninsular, Baleares y Golfo de Cádiz.