Mamuts o uros, dos colosales especies extintas que la ciencia quiere resucitar

Los avances genéticos permiten a los investigadores insertar genes de especies extintas en animales similares que estén vivos con el fin de recuperarlos. ¿Será posible lograrlo con mamuts y uros?

Mamut
Los científicos están cada vez más cerca de recuperar a especies que se extinguieron hace miles de años

La resurrección de animales extintos como el mamut, los uros o el tigre de Tasmania es vista por algunos científicos como una utopía, mientras que para otros representa un sueño alcanzable y cada vez más próximo.

La ingeniería genética ha avanzado a pasos agigantados en los últimos años y cada vez se está más cerca de traer de vuelta a la vida a estas colosales criaturas que desaparecieron hace miles de años. ¿Qué están haciendo los científicos para conseguirlo?

El ADN, clave para ‘resucitar’ especies extintas

La desextinción comienza a partir de muestras de ADN de especies ya extintas. En algunos casos se cuenta con el genoma completo, mientras que en otros se insertan genes de la especie extinta en el genoma de un animal vivo con características similares.

Posteriormente, en un proceso llamado transferencia nuclear, los científicos implantan esta secuencia genética en un óvulo de una especie viva estrechamente emparentada, al que previamente se le ha eliminado su ADN original. El animal resultante es genéticamente muy cercano a la especie extinta.

Así se va a recuperar a los mamuts lanudos

Los mamuts lanudos vivieron entre hace 300 000 y 10.000 años, durante la última era glacial, aunque una pequeña población sobrevivió en la isla de Wrangel hasta hace unos 4000 años.

Ejemplar de mamut en un museo
El permafrost del Ártico ha conservado restos de estos animales, por lo que es posible obtener su genoma

Gracias a que el permafrost del Ártico ha conservado restos de estos animales, es posible obtener su genoma. Esto permite a los científicos extraer ADN y llevar a cabo una transferencia nuclear con un óvulo de elefante moderno, lo que podría generar una especie muy similar al mamut lanudo.

Los investigadores se encuentran cerca de conseguir la desextinción del mamut. De hecho, la compañía estadounidense Colossal Biosciences planea producir sus primeras crías de mamut para 2028.

Recuperar a los uros, una tarea más sencilla

Una de las opciones más interesantes para los científicos es la desextinción de los uros, que son los antepasados salvajes de todo el ganado moderno, incluidas las vacas domésticas. Estos animales eran enormes, con cuernos de hasta un metro de largo, y habitaron el norte de África, Asia y gran parte de Europa durante miles de años.

Tras la última edad de hielo, fueron los mamíferos terrestres más grandes de Europa, pero los humanos los extinguieron a causa de la caza excesiva y la destrucción de su hábitat. El último uro conocido murió en 1627 en el bosque de Jaktorów, Polonia.

A diferencia de otros proyectos de desextinción, los esfuerzos actuales para devolver a la vida al uro no requieren ingeniería genética. Gran parte del ADN de los uros todavía está presente en las razas de ganado modernas, lo que ha permitido a los investigadores emplear un método alternativo conocido como retrocruzamiento.

Este proceso consiste en seleccionar y criar vacas que presenten características físicas y comportamientos similares a los del uro, principalmente a partir de razas del sur de Europa que se crían en condiciones semisalvajes. El proyecto ha logrado producir más de seis generaciones de ganado y está muy cerca de obtener un ejemplar parecido al uro original.

Excavación arqueológica
Los esfuerzos actuales para devolver a la vida al uro no requieren ingeniería genética

Ahora solo queda esperar a que los avances científicos den sus frutos para que en unos años se haya conseguido recuperar a estas dos especies que se extinguieron hace miles de años.