Los nombres cursilones que China ha elegido para las naves que llevarán a sus astronautas a la Luna
Medio siglo después de la llegada del hombre a la Luna, el mundo asiste con expectación a una nueva carrera espacial. El gigante asiático pugna por conseguir el liderazgo y ya ha "bautizado" las naves con las que lo intentará.
Entre 1969 y 1972, doce hombres caminaron sobre la superficie de la Luna en las 14 incursiones que la NASA llevó a cabo, todas en el marco de su programa Apolo. Hace unos días y más de medio siglo después, mediante el programa internacional de vuelo espacial denominado Artemis, se ha conseguido que un módulo no tripulado llamado Odysseus, alunice en el polo sur del satélite.
Se trata de un proyecto liderado por la NASA y en el que colaboran empresas privadas de vuelos espaciales de Estados Unidos, además de la Agencia Espacial Europea y las de Japón, Canadá, Israel y Australia.
Una nueva carrera espacial
Frente a ellas, China ha avivado la que es ya una nueva carrera espacial. Y promete impactantes avances en la exploración lunar. Para conseguir su hazaña, el país asiático ha anunciado el lanzamiento de dos naves por separado con sus primeros astronautas.
A pesar de que se trata de su primera experiencia en un programa lunar tripulado, en los últimos años, sondas robóticas lunares enviadas por China ya han conseguido importantes logros, adelantándose a Estados Unidos.
El más importante, traer de vuelta muestras de las regiones más jóvenes del satélite, incluido el Oceanus Procellarum, que es visible desde nuestro planeta en forma de gran mancha negra. Algo que solo Rusia había logrado en 1976.
La sonda Chang'e-5, también ha captado y enviado a la Tierra imágenes impresionantes del satélite, e incluso aseguran que ha encontrado una reserva lunar con 270.000 millones de toneladas de agua.
Y aunque China se ha marcado de plazo el año 2030 para conquistar la Luna, ya anunciado el nombre de las naves que intentarán la gesta. No negamos que tengan un fuerte y emotivo significado para el país, pero, parecen sacados de una serie romántica de anime.
Astronautas en órbita en la Mengzhou
El orbitador Mengzhou (梦舟) será el encargado de llevar tres astronautas desde la Tierra hasta la órbita lunar. También se prevé que se convierta en el primer módulo de una futura estación orbital lunar china, que iría creciendo con más misiones.
El nombre escogido significa 'barco de los sueños', y representa el anhelo chino de alcanzar la luna. Una aspiración que aún va más allá, ya que China también pretende establecer una base permanente en el satélite, dentro del proyecto ILRS.
El programa lunar chino también dará un nuevo paso en breve con el lanzamiento, en el primer semestre de 2024, de Queqiao-2. Se trata de un satélite que permitiría la retransmisión de comunicaciones entre la cara oculta de la Luna y la Tierra.
Alunizaje con el aterrizador Lanyue
Pero volvamos a la presencia humana en la Luna. La otra nave integrante de la misión en ciernes es el aterrizador Lanyue (揽月). Su función es acoplarse a la Mengzhou, transportar a dos de los tres astronautas hasta la superficie lunar y devolverlos nuevamente a esta que, a su vez, les traerá de regreso a la Tierra.
Lanyaue significa 'abrazando la Luna'. El nombre está inspirado en un poema de Mao, el que fuera primer presidente de la República Popular y fundador del Partido Comunista de China, según ha informado la Oficina de Ingeniería Espacial Tripulada de China.
Ambas naves serán lanzadas por el cohete portador Long March 10, con el que el gigante asiático se prepara para dejar su huella en la Luna, y puede que aún para conseguir otro hito más. Porque es posible que sea esta potencia la primera que logre que una mujer también pise la luna.