Vuelve a brillar el cielo: ¡ya están aquí las leónidas!
En unos días será el pico máximo de las leónidas, aunque este año la Luna dificultará su observación. ¿Cuándo será?¿Qué sitios son los mejores para disfrutar de esta lluvia de estrellas? Te lo contamos aquí
Una lluvia de estrellas es un maravilloso espectáculo de luces que fascina a todo el mundo. Durante el año tenemos muchas, aunque algunas son díficiles de ''cazar''. Sin embargo, si te gusta disfrutar de este fenómeno, apunta: llegan las leónidas, y muy pronto será el máximo.
2021 no es el mejor año para verlas
Las leónidas son una lluvia de meteoros visibles todos los años entre el 6 y el 30 de noviembre. Proceden del cometa 55P/Tempel-Tuttle, que tarda 33,2 años en dar una vuelta completa en su órbita. Teniendo en cuenta que la última vez que pasó cerca de nuestra órbita fue en 1998, no será hasta el 2031 cuando podamos ver una gran lluvia de estrellas en noviembre, como sucedió en 1833 en América del Norte.
Según el Observatorio Astronómico Nacional (OAN), el próximo 16 y 17 de noviembre será su pico máximo. Su tasa de actividad varía entre 10 y 20 meteoros por hora, una cifra bastante modesta si las comparamos con otras lluvias de estrellas. Desgraciadamente, este año no será el mejor para su observación, ya que su pico máximo será justo dos días antes del plenilunio del 19 de noviembre, aunque entre las 4:00 h. y las 6:00 h. de la madrugada, justo cuando la Luna comience a ponerse tras el horizonte, las condiciones serán algo mejores.
¿Meteoros o meteoritos?
Las leónidas y otras estrellas fugaces no son más que meteoros. Se trata de los ''restos'' que un cometa ha dejado a su paso y siguen su misma órbita. Las leónidas son fragmentos del cometa 55P/Tempel-Tuttle.
El tamaño de las leónidas es variable, y puede oscilar entre un milímetro y varios centímetros. Al entrar en nuestra atmósfera se desintegran viajando a grandes velocidades (20.000 kilómetros por hora o 71 kilómetros por segundo, aproximadamente). En el caso de que su tamaño fuera más grande y no se llegasen a quemar dentro de nuestra atmósfera, dejarían de ser meteoros para convertirse en meteoritos.
Hay que salir de la ciudad para verlas
Como sucede con otras lluvias de estrellas, el lugar de observación puede ser cualquiera, siempre y cuando sea en campo abierto o en la montaña, o en pequeños núcleos de población. Cualquier mirador, montaña o espcios abiertos y sin obstáculos son sitios para disfrutar de las leónidas. Lo más aconsejable es salir de la ciudad para evitar la contaminación lumínica.
Se recomienda llegar al punto de observación entre media hora y una hora antes de comenzar el espectáculo de estrellas fugaces, así daremos tiempo a nuestra vista para que se acostumbre a la oscuridad. Es recomendable que, a pesar del estado de la Luna, se mire hacia las zonas más oscuras, siendo indiferente la dirección. Eso sí, no te olvides una buena chaqueta porque ya las noches son frías.