La NOAA y la NASA avisan: una fuerte tormenta geomagnética está llegando a la Tierra, ¿cuáles serán sus efectos?

Las predicciones relativas a nuestra estrella y a su ciclo de actividad magnética eran que alcanzaría su pico de actividad a finales de este año, y así ha sido. Los signos de la frenética actividad solar son claramente visibles en la superficie del Sol, que sabemos es capaz, en algunas ocasiones, de causar grandes perturbaciones incluso en nuestro planeta.

Esto es exactamente lo que podemos esperar en las próximas horas, ya que en los últimos días se ha producido en el Sol una intensa llamarada de clase X, la más potente. Para ser precisos, la llamarada fue de clase X4,5 y se dirigió justo hacia la Tierra.

Últimas previsiones de la NOAA y la NASA

Según las previsiones de la NOAA (National Oceanic and Atmospheric Administration) y de la NASA (National Aeronautics and Space Administration), la agencia gubernamental civil responsable del programa espacial estadounidense y de la investigación aeroespacial, se espera que la tormenta solar alcance la Tierra entre las 06:00 y las 18:00 UTC de hoy.

Según el boletín emitido por la NOAA, la agencia científica y reguladora estadounidense que se ocupa principalmente de la previsión meteorológica y la vigilancia de las condiciones oceánicas y atmosféricas, la región activa AR3825 produjo hace dos días una eyección de masa coronal (CME) además de la intensa llamarada.

Las regiones activas no son más que conjuntos de estructuras en forma de arco que conectan puntos de polaridad magnética opuesta. En estas regiones pueden producirse llamaradas y eyecciones de masa coronal, a menudo asociadas entre sí, y estas últimas no son más que grandes eyecciones de material de la corona solar.

Así, desde la región AR3825 se expulsó material, en forma de plasma y compuesto principalmente por electrones y protones, que fue arrastrado hacia el espacio exterior por el campo magnético de la corona solar.

Entre otras cosas, la presencia de dos agujeros coronales, es decir, zonas en las que el campo magnético se extiende hacia el espacio interplanetario como un campo abierto, reconocibles como más oscuras y frías que las zonas circundantes, influyó y anticipó la llegada del plasma solar a la Tierra, que llegará hoy.

Se espera que la llegada de esta corriente de partículas solares dé lugar a una tormenta geomagnética de nivel G3, es decir, fuerte. La tormenta afectará principalmente a latitudes altas, por encima de los 50 grados hasta los polos, y puede causar algunas perturbaciones.

En particular, se prevén interrupciones en las líneas eléctricas debido a posibles irregularidades en la tensión, como falsas alarmas en algunos dispositivos de protección.

Los satélites también se verán afectados por la tormenta

Las naves espaciales también se verán afectadas por el paso de la tormenta, sus superficies pueden cargarse y pueden tener problemas de orientación. Incluso en la Tierra puede haber problemas de radiocomunicación y navegación debido a posibles perturbaciones en la red GPS.

Estas son, pues, las principales perturbaciones que podemos sufrir con la llegada de esta tormenta solar, pero no olvidemos los espectáculos que puede generar, como las hermosas auroras que en este caso pueden ser visibles hasta Pensilvania y hasta Oregón.