La ciudad más antigua de España está en Andalucía: tiene 7.200 años y es un vestigio de la Edad de Cobre

En el sureste de España, donde el paisaje se tiñe de ocres y arenas bajo un sol implacable, se oculta una joya arqueológica de incalculable valor. ¿Te atreves a decir dónde está y cómo es?

Casa de los Millares
Reconstrucción de viviendas prehistóricas en la zona Interpretativa de Los Millares, que permite imaginar cómo vivían sus habitantes hace más de 7.000 años, unas casas hechas con piedra y barro.

Almería, tierra de contrastes, ha sido testigo del paso de innumerables civilizaciones a lo largo de milenios. Sin embargo, pocos conocen que en su territorio se encuentra el que podría considerarse el primer gran asentamiento urbano de España.

Un auténtico vestigio de la Edad del Cobre que revela los primeros signos de una sociedad compleja, organizada y avanzada, con conexiones comerciales y culturales que trascendían los límites de la región.

Los Millares, una ciudad fortificada de la prehistoria

Nos referimos a Los Millares, población ubicada en el municipio de Santa Fe de Mondújar, a unos 20 kilómetros de la ciudad de Almería, un auténtico yacimiento arqueológico que tiene aproximadamente unos 7.200 años de antigüedad. Descubierto en 1891 durante la construcción de una vía ferroviaria, el sitio sorprendió a los expertos por su complejidad y magnitud.

El enclave se extiende sobre una superficie de 6 hectáreas y destaca por su sistema defensivo, compuesto por cuatro anillos amurallados, bastiones y fortines exteriores, lo que sugiere que sus habitantes enfrentaban amenazas constantes. Dentro de las murallas, se hallaban cabañas circulares construidas con mampostería y barro, en las que convivían grupos clánicos bajo un modelo colectivista.

El lugar fue excavado a lo largo del siglo XX por investigadores como Luis Siret, quien confirmó que se trataba de una de las primeras ciudades fortificadas de Europa.

Su economía se basaba en la ganadería y la agricultura, con cultivos como trigo, cebada, habas y guisantes, además de la cría de ovejas, cerdos y vacas. Sin embargo, Los Millares también fue un importante centro artesanal y metalúrgico. La producción de objetos de cobre se realizaba en talleres especializados, lo que evidencia una organización del trabajo avanzada para la época.

Una sociedad conectada con el mundo

No obstante, si hay algo que fascina de este enclave es su necrópolis. Se han identificado unas 80 sepulturas colectivas, cada una con hasta un centenar de individuos.

Estos enterramientos estaban acompañados de ajuares funerarios con objetos exóticos como ámbar, marfil y cáscaras de huevos de avestruz, elementos que no son autóctonos de la región. Este hallazgo indica que la comunidad mantenía contacto con otras civilizaciones de África y Asia, formando parte de una red de intercambios comerciales y culturales mucho más extensa de lo que se había supuesto para este periodo.

La importancia de Los Millares radica no sólo en su antigüedad, sino en su influencia en el desarrollo de las sociedades de la península. Su estructura urbana, su capacidad de defensa y su organización social marcan un punto de inflexión en la historia de los asentamientos humanos en Europa.