La borrasca Dorothea deja ríos desbordados y un metro de nieve en zonas de montaña del norte: última hora e imágenes
La borrasca Dorothea está dejando un importante temporal de lluvia, viento, mar y nieve en varias regiones de España. En algunas zonas los ríos se han desbordado, mientras que en cotas altas las nevadas son muy considerables.
Las previsiones se han cumplido y en las últimas horas las precipitaciones están siendo muy abundantes en la vertiente cantábrica, norte de Navarra y en el sector occidental del Pirineo, con lluvias cuantiosas en cotas bajas y nevadas importantes en zonas altas, con una cota que ha ido sufriendo altibajos. Todo ello ha ido acompañado de un descenso térmico y vientos intensos en buena parte del país.
El centro de la borrasca fría Dorothea se encuentra en estos momentos en los alrededores de Córcega y Cerdeña, tras cruzar Francia ayer rápidamente. La posición de esta baja y del anticiclón favorece la llegada de aire polar, con vientos del norte-noroeste en superficie. Con esta situación, las lluvias y las nevadas están siendo abundantes y persistentes en el extremo septentrional.
Este martes se está viviendo una situación complicada en el País Vasco o Navarra, donde muchos ríos bajan bastante crecidos, amenazando con desbordarse a su paso por varias poblaciones de la zona. Según nuestro modelo de referencia, las precipitaciones se mantendrán en las próximas horas, pero ya con menos intensidad.
Según la Confederación Hidrográfica del Ebro, las lluvias provocarán crecidas importantes en todos los afluentes de la margen izquierda del Ebro desde su nacimiento hasta la cuenca del río Aragón, que puntualmente serán extraordinarias, por lo que habrá que vigilar la situación en estas próximas horas.
También están llegando imágenes impresionantes desde las Béticas, donde las precipitaciones han sido también cuantiosas y persistentes, provocando un importante aumento en los caudales en los ríos que nacen en esta sector, que no pasaban por su mejor momento, entre ellos el Guadalquivir, el Segura, el Mundo o el Borosa. Buenas noticias para los embalses, sin duda.
Por último, la nieve ha sido otra de las grandes protagonistas de este temporal. En estos meses su ausencia ha sido noticia, pero en los últimos compases del invierno climatológico ha llegado la nevada más importante de la temporada, dejando espesores que rondan o superan los 100 cm en cotas altas de ciertos sectores de la Cordillera Cantábrica y del Pirineo aragonés y navarro.
A diferencia de situaciones anteriores, en esta ocasión no se va a producir un ascenso súbito y acusado de las temperaturas que se lleve por delante gran parte de la nieve, por lo que sin duda son grandes noticias para nuestras montañas. La nieve es un recurso hídrico fundamental para la primavera y el verano, sin olvidar que está siendo recibida con los brazos abiertos por las estaciones de esquí en una temporada bastante complicada.
Tras el paso de Dorothea, que se irá adentrando hacia el Mediterráneo y donde será reemplazada por Emil, que podría adquirir algún rasgo subtropical, tendremos unas jornadas de transición, pero de cara a la recta final de la semana una nueva borrasca podría impulsar otra masa de aire polar hacia la Península, con lluvias y nevadas en buena parte del país para dar la bienvenida a la primavera climatológica.