Granizada excepcional e inundaciones en Roma
Ayer por la noche una fuerte tormenta dejó lluvias torrenciales y granizo excepcional en la ciudad italiana de Roma. Las calles se convirtieron en ríos que transportaban peculiares 'témpanos' de hielo.
Ayer por la noche una fortísima tormenta dejó lluvias torrenciales y granizo en la ciudad italiana de Roma. En menos de dos horas se recogieron cerca de 70 litros por metro cuadrado que anegaron numerosas calles, tras un día que había sido caluroso con máximas de 25ºC. Precisamente, ese contraste entre las altas temperaturas en superficie y el aire frío en altura fue el detonante de los potentes cumulonimbos. El aguacero llegó acompañado de abundante granizo que dejó casi un panorama ártico en las avenidas Palmiro Togliatti o Torre Spaccata.
Muchos conductores tuvieron que ser rescatados por la policía y los bomberos. Estos últimos solo en la provincia de Vía Génova acometieron 120 intervenciones de rescate en pocas horas, la mayoría en pasos subterráneos. El diluvio no dejó heridos pero sí daños por inundación, que han provocado una noche de insomnio y achiques: entró medio metro de agua en la Basílica de San Sebastiano sull’Appia, siete paradas de metro tuvieron que ser cerradas y se cortaron un buen puñado de carreteras.