El congelador se está activando: los primeros -55 ºC en Groenlandia
El congelador del norte de Europa funciona a todo gas y está dejando temperaturas de pleno y riguroso invierno en latitudes altas. Allí encontramos valores de casi -20 ºC en Escandinavia o inferiores a los -40 ºC en Groenlandia.
El otoño va avanzando y las masas de aire frío de latitudes altas también se van recrudeciendo. En Groenlandia, por ejemplo, hay una gran "bomba de aire frío" de hasta -30 ºC a 1.500 metros de altitud, que ayer dejó valores cercanos a los -55 ºC en Summit Camp, la meseta de Groenlandia.
El frío también es intenso, aunque un poco menos, en el norte de los países escandinavos, con registros de hasta -17 ºC en Salla (Finlandia) o -16 ºC en Nattavaara (Suecia).
En este momento se está cumpliendo la correlación entre la fase de La Niña en el Pacífico con una Oscilación del Atlántico Norte positiva (NAO+), y en efecto, una corriente en chorro fuerte e intensa en latitudes altas.
A lo largo de esta semana el anticiclón atlántico y las altas presiones de Centroeuropa tendrán una alianza perfecta para bloquear las masas de aire frío y mantenerlas en latitudes muy altas, con un remanente en el Mediterráneo occidental. Eso sí, a mediados de semana, una profunda perturbación islandesa mandará aires más templados hacia Escandinavia y gran parte de Europa, donde podrán subir transitoriamente las temperaturas.
Noviembre "dos caras" ️: fresco en el Mediterráneo occidental ️ mientras el resto de Europa presentará temperaturas por encima de lo normal ️. pic.twitter.com/FUS4gX0wCx
— Meteored | tiempo.com (@MeteoredES) November 8, 2021
La doble versión del mes de noviembre
Si nos fijamos a medio plazo, los modelos estacionales no concuerdan ni presentan homogeneidad de situaciones. Por un lado, el centro europeo marca un ambiente más frío de lo normal en Groenlandia, en Escandinavia y en el triángulo compuesto entre los Alpes, los Balcanes y el Adriático. En el caso de España, no da anomalías muy importantes de temperatura, con lo cual, más o menos dentro la normalidad.
Por otro lado, el modelo estadounidense GFS, descuelga una potente descarga de aire frío a mediados de mes que provocaría temperaturas inferiores a las normales en la Península Ibérica y en general en todo el Mediterráneo occidental, Europa Central y fachada atlántica del continente.
Primera descarga de aire polar en España
A pesar de esa disparidad de proyecciones a medio plazo, en España ya hemos vivido el primer contacto con el frío intenso, derivado de la masa de aire polar que nos sacudió a mediados de la semana pasada. Esa zona de aire frío ha sido la responsable de gestar la borrasca Blas, que continuará pivotando en torno al mar Balear.
La entrada de ese aire frío, con una advección de componente norte y una situación encalmada posteriormente, ha propiciado temperaturas nocturnas gélidas en muchos puntos del país. Destacamos los -10 ºC en Cap de Vaquèira (Lleida), -7 ºC en Dílar (Sierra Nevada) o -5 ºC en Puerto de Navacerrada (Madrid).