Expertos al habla: ¿se avecina una ola de frío?

El zarpazo invernal parece asegurado desde hace días para el fin de semana, hay unanimidad en los modelos. Entre los medios de comunicación no hay esa complicidad, ¿viene o no una ola de frío? Tres expertos te lo cuentan.

Ola de frío
Este fin de semana la cota de nieve podría desplomarse por debajo de los 1000 metros en el norte de la Península.

Desde hace días los mapas de previsión vienen barruntando un episodio de frío, lluvias y nieve en cotas no demasiado altas. En algunas zonas de la Península y Baleares el mercurio caerá cerca de 10ºC. En Tiempo.com hemos recurrido a tres expertos para que analicen la situación y nos aclaren si habrá, o no, una ola de frío detrás.

José Miguel Viñas, físico del aire y consultor de la OMM

Los modelos de predicción se ponen de acuerdo en que, coincidiendo con el fin de semana, se descolgará sobre la Península Ibérica una masa de aire frío que provocará un descenso muy acusado de las temperaturas entre el sábado y el domingo en todo el territorio peninsular y Baleares, con nevadas en cotas medias y altas en todos los sistemas montañosos, así como en la meseta norte.

El tiempo se volverá invernal en la mayor parte de nuestro país. La masa de aire tendrá un origen ártico (no será aire siberiano) y llegará a nuestro territorio aprovechando un pasillo que se formará entre dos potentes dorsales de altas presiones, una que se localizará en mitad del Atlántico Norte y otra en Europa oriental, donde subirán las temperaturas. Las nevadas serán particularmente copiosas en el área de la Cordillera Cantábrica, pudiendo bajar la cota de nieve puntualmente por debajo de los 500 metros. Entre el viernes y el domingo, las máximas en muchas localidades del norte e interior peninsular descenderán entre 10 y 12 ºC. De cara al lunes, el aire frío alcanzará de lleno el Mediterráneo, donde podrán producirse lluvias intensas con actividad tormentosa.

Rafael Requena, Delegado en Aragón de AEMET

¿Ola de frío? Habrá que esperar para saber si se alcanzan los criterios. Los modelos meteorológicos apuntan a una incursión de aire frío polar ártico. La diferencia con el aire polar marítimo es que la procedencia de latitudes altas llega de forma más directa desde la zona polar. El aire polar marítimo lo hace con un mayor recorrido sobre el océano Atlántico, y aunque ambas masas de aire son frías, la marítima es suavizada en parte en su trayectoria. Las temperaturas descenderán de 10 a 15 grados respecto a los valores actuales, pero hay que tener en cuenta que se parte desde máximas que están superando los 20ºC, incluso alcanzando los 25ºC. Otra cuestión serán las mínimas, con aparición de las primeras heladas significativas, sobre todo en zonas que posteriormente queden despejadas y sin viento.

La precipitación en principio no debe ser tan alta como en el reciente episodio de la semana pasada, 18 a 21 de octubre, que estaba asociado a una DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) centrada en el sur de la Península, y que contó además con otros ingredientes como eran la convergencia de humedad en niveles bajos procedente del Mediterráneo que afectó especialmente a determinadas zonas como Castellón, Valencia, Teruel, Málaga, Sevilla, etc. En este caso la procedencia del viento en todos los niveles será del norte aunque habrá que valorar la posible interacción con masas de aire subtropicales todavía asociadas a la situación anterior, así como la posible formación de otra DANA. La nieve va a estar presente y, además de las montañas, en algún momento bajando la cota por debajo de 1000 m.

David Arango, meteorólogo en RTPA

Estamos ante la primera entrada fría de entidad del otoño. Aunque al principio de la semana parecía que el recorrido de la masa de aire que llegará a la península el fin de semana iba a tener mayor recorrido continental, los modelos dibujan a día de hoy, unánimemente, una entrada de aire con un recorrido marítimo significativo. El flujo de norte sobre el Cantábrico y los Pirineos augura una entrada prolífica en lo que a precipitación sólida se refiere en la Cordillera Cantábrica, zona norte del Sistema Ibérico y Los Pirineos. Mientras que en el resto de zonas montañosas del norte peninsular parece que la nieve será anecdótica.

La persistencia de la masa de aire sobre nosotros podría no ser la suficiente como para permitir que hablemos de una ola de frío, atendiendo a la definición estricta y técnica de la expresión, ya que el domingo se iría retirando ese aire y las temperaturas ya no llegarían a ser lo suficientemente bajas como para poder alcanzar los valores que exige la consideración de “ola de frío”. Al margen de ello, el que a este episodio frío se le considere o no “ola de frío” adquiere importancia “a posteriori”, como evento a estudiar, pero no debería ser un tema capital de debate antes de la situación.