Estrecho de la Arboleja, una ruta por el Antelope Canyon español
Se encuentra en la zona del Levante y es un auténtico espectáculo para la vista, con paredes de hasta 10 metros de altura que se estrechan hasta poder tocarlas con las manos. Descubre dónde está.
Para ver el Antelope Canyon hay que viajar hasta Arizona, Estados Unidos, a unos 6 kilómetros de la ciudad de Page, y para ello necesitamos, además de tiempo para hacer un vuelo transoceánico, tener una economía solvente.
Lo que quizá no sabías es que en nuestro país podemos visitar uno parecido, más cerca y sin tener que hacer un gran desembolso económico, pues lo tenemos cerquita, en la Región de Murcia.
Nuestro particular Gran Cañón en el Levante
Para disfrutar de él tenemos que viajar hasta Aledo, un pequeño municipio en el nordeste de la comarca, situado a los pies de Sierra Espuña.
Allí, a unos 60 kilómetros de Murcia, se encuentra el Estrecho de la Arboleja o Agualeja, un espacio natural conformado por un cañón que el agua ha ido esculpiendo sobre roca caliza durante muchísimos años.
Estamos hablando de un lugar apto para todos los senderistas, expertos o no, e ideal para ir en familia. Forma parte del Barranco o la Rambla de Lébor, un curso de agua intermitente que recoge parte de las filtraciones que vienen de Sierra Espuña y que cruzan un terreno muy árido y con poca vegetación.
Pese a que el tramo del estrecho tiene una extensión que no llega a los 400 metros, con paredes verticales de entre 10 y 15 metros de altura, hay tramos donde la anchura sobrepasa poco más de 1 metro, de manera que podemos tocar las dos paredes del desfiladero.
Visita obligada para los amantes de la geología
Hace unos años se acondicionó el lugar para la visita, con un recorrido circular con barandillas y escaleras. Eso sí, una vez te adentras en la cavidad, apenas entran los rayos del sol, y tiene una humedad muy alta.
Un lugar ideal para los amantes de la geología, pues al formar parte de la cuenca terciaria de Lorca, se pueden observar tres formaciones estratigráficas. Por un lado margas de Carivete, y por otro, areniscas de Aledo (originadas ambas en medios marinos), además de las ruditas detaicas de Nonihay.
Clima semiárido que alberga variedad de flora y fauna
Al tratarse de un clima semiárido-seco con veranos cálidos e inviernos frescos y con lluvias irregulares de 300 litros por metro cuadrado, es normal que albergue también gran variedad de flora y fauna en su interior.
Destacan mamíferos como la liebre blanca, el zorro, la ardilla, el jabalí o arruí del Atlas, y entre las aves destacan las chovas y arrendajos, aunque esporádicamente se pueden avistar halcones e incluso lechuzas y búhos. En cuanto a flora, lo más habitual en la zona son las especies del llamado piso mesomediterráneo, con pino, enebro, esparto, espino y tomillo.