Este episodio de nevadas ni confirma ni desmiente el cambio climático
Si oís a algún negacionista decir que este episodio de nieve es el claro ejemplo de que el calentamiento global no existe, no os riáis, podría llegar a presidente.
Prácticamente al mismo tiempo que asaltaron el Capitolio de los EEUU, ocurrieron las nevadas históricas en España. Dos hechos no correlacionados: si vuelven a asaltar el Capitolio no volverá a nevar en Madrid, aunque esto de las causas/efectos tampoco lo llevamos bien.
Antes de que Donal Trump llegara a la presidencia, ya escribía tweets sobre cómo la ola de frío que estaba sufriendo durante un "meeting" era la prueba de la farsa del cambio climático. Qué pena que no le “bannearan” la cuenta de dicha red social en aquel momento, incitar a los negacionistas del cambio climático también nos pone en peligro. Estos días hemos podido ver gente haciendo comentarios similares debido a las históricas nevadas sufridas en gran parte de España. Y es que todavía hay muchos conceptos que no quedan claros. El cambio climático no es lo que ocurre un día puntual, ni unas semanas, es más complejo pero siempre nos quedamos con lo simplista y sensacionalista.
Todavía se confunde clima y meteorología
El prestigioso meteorólogo John Wallace que trabajó en la Universidad de Washington dijo “Climate is what we expect. Weather is what we get”. Que podría traducirse algo así como el clima es lo que esperamos mientras que el tiempo lo que obtenemos. Aunque para la mayoría de la audiencia seguro que ya está clarito, no está de más recordar que la diferencia está en la escala de tiempos. El tiempo describe las condiciones de la atmósfera en un periodo corto de tiempo, mientras que si hablamos de clima esa escala temporal es un periodo más largo, por ejemplo 30 años según OMM.
Cuando entré en Meteored justo mi compañero trabajaba en unos vídeos que indican anomalías de temperaturas a 2 metros. Yo siempre fui muy escéptica de que se entendiera realmente el significado de esos vídeos. Las anomalías de las climatologías no son más que la propia meteorología. La temperatura siempre va a ser más alta o más baja que la media climatológica calculada. Para saber si esas desviaciones de las climatologías son realmente significativas hay que ir más allá en el análisis. Un ejemplo lo podemos ver en la web desarrollada por investigadores de la Universidad de les Illes Balears.
¿Puede ser este evento causa del cambio climático?
Asegurar que este evento meteorológico que acabamos de sufrir es causa del calentamiento global es una imprudencia tan grande como decir lo contrario. De hecho, investigar si un evento puntual es causa del cambio climático es muy complicado por no decir imposible. Se necesitaría años de un becario mal pagado para poder analizar el evento en profundidad. Incluso es complicado resumir el estado del arte sobre el cómo el calentamiento global afecta a la precipitación y en particular a la nieve.
En 2014, Paul O’Gorman en su trabajo Contrasting responses of mean and extreme snowfall to climate change no llega a una conclusión clara sobre si las nevadas extremas podrían aumentar o disminuir dependiendo de la región que nos encontremos. Por ejemplo, un estudio sobre eventos de nevadas intensas en China concluyó que el calentamiento global causaría una disminución de sus frecuencias en el sur pero un aumento sobre el norte.
Otro estudio, en este caso sobre Japón, consideró que la intensificación de la zona de convergencia de masas de aire polar del mar de Japón y de los vientos verticales sobre las montañas reforzaría las fuertes nevadas. Igualmente, una investigación centrada en Colorado encontró que los principales impactos del cambio climático eran aumentar la fusión de la nieve en altitudes bajas y aumentarla en las altas. Más aún, el estudio Persisting cold extremes under 21st‐century warming scenarios de 2011 decía que el calentamiento global no aseguraba la disminución de eventos extremos fríos.
No se debate, se divulga
Estos días incluso ha habido programas de televisión invitando a científicos a debatir sobre el cambio climático. ¡¿Debatir?! Un hecho científico no se debate, ni tampoco es democrático. Nadie va a debatir sobre las leyes de Newton o sobre la existencia del boson de Higgs. Se puede debatir dentro de la comunidad científica teorías recientes y poner en común diferentes experimentos pero a los medios de comunicación se va a divulgar con rigor. Conozco a un científico que se negó a ir a la mesa de debate entre otros con un cura, no es que tuviese nada en contra de la Iglesia, pero una cosa es el deber de los científicos de difundir su conocimiento al ciudadano y otra formar parte del salsa rosa del cambio climático.
Pero es que este evento ha ido incluso más lejos, hemos encontrado hasta negacionistas de la existencia de la nieve. Según ellos era puro plástico. Puro serrín es lo que tiene algunos en la cabeza y lo peor es que pueden llegar a presidentes.