Estado de los embalses en España: ¿incrementará la DANA las reservas de agua?

Septiembre ha comenzado con tormentas muy fuertes en varias regiones, que parece que se mantendrán en las próximas jornadas. Te contamos si se ha producido un cambio importante en el agua embalsada por esta situación.
El otoño climatológico ha comenzado con lluvias intensas asociadas al paso de vaguadas y danas: ¿se notarán sus efectos en los embalses?

En estos días se están registrando lluvias muy intensas, especialmente en el este y Baleares. Estas precipitaciones torrenciales generan grandes acumulaciones de agua en poco tiempo, provocando inundaciones y daños de cierta entidad.

Las inundaciones se deben principalmente a dos factores: la alta intensidad de las precipitaciones y la extrema sequedad del suelo, que impide la absorción adecuada del agua de lluvia. Tampoco hay que olvidar la ocupación de zonas inundables en áreas urbanas.

El agua embalsada en España baja del 50%

En las últimas semanas, especialmente a finales de agosto, en gran parte de la península ibérica se han registrado fuertes aguaceros, con acumulados que superan los 100 l/m² en cortos periodos de tiempo.

Sin embargo, como se verá a continuación, estas lluvias no se han traducido en una mejora significativa en los niveles de agua embalsada en las cuencas hidrográficas. Hay grandes diferencias entre las distintas zonas de la península en cuanto a la cantidad de agua almacenada


Cuenca
CapacidadAgua embalsadaVariación sobre la semana anterior
Tajo110566610 (59,79%)- 1,10%
Guadiana94983891 (40,79%)- 0,52%
Guadalquivir80302632 (32,79%)- 0,86%
Ebro78024021 (57,53%)- 1,77%
Duero76005092 (67,00%)- 2,43%
Miño-Sil30302218 (73,20%)- 1,82%
Júcar28461196 (42,02%)- 0,81%
Guadalete - Barbate1651367 (22,23%)- 0,48%
Mediterránea Andaluza1174295 (25,13%)- 0,68%
Segura1140196 (17,19%)- 0,44%
Galicia Costa684515 (75,29%)- 3.95%
Cataluña Interna677209 (30,87%)- 0,74%
Cantábrico Occidental490 367 (74,90%)- 6,53%
Tinto, Odiel y Piedras 229 175 (76,42%)- 0,87%
Cantábrico Oriental7357 (78,08%)- 2,74%
País Vasco Interna2119 (90,48%)0,00%
Situación actual de los embalses en España. Fuente: Embalses.net.

La cuenca del País Vasco Interna lidera con un 90,48% de su capacidad total embalsada y no ha mostrado variación respecto a la semana anterior. Le sigue la cuenca del Cantábrico Oriental, con un 78,08% de agua embalsada, aunque ha registrado una ligera disminución del 2,74%.

La del Tinto, Odiel y Piedras también muestra un alto nivel de agua almacenada, con un 76,42% de su capacidad y una variación de -0,87%. Las cuencas de Galicia Costa y Cantábrico Occidental tienen porcentajes de 75,29% y 74,90%, respectivamente, aunque ambas muestran significativas caídas, especialmente la del Cantábrico Occidental, con una disminución del 6,53% respecto a la semana anterior.

Las cuencas hidrográficas en peor situación

En contraste, la cuenca del Segura presenta la situación más crítica con solo un 17,19% de agua embalsada y una leve disminución del 0,44% respecto a la semana anterior. La de Guadalete-Barbate también está en una situación delicada, con un 22,23% de su capacidad y una pequeña variación de -0,48%. Le sigue la cuenca Mediterránea Andaluza, con un 25,13% de agua almacenada y una disminución del -0,68%.

Por su parte, la cuenca de Cataluña Interna tiene un 30,87% de agua embalsada, con una variación del -0,74%, mientras que la del Guadalquivir registra un 32,79% de su capacidad embalsada, con una variación del -0,86%.

Lluvias muy irregulares y sequedad extrema del suelo

En las actuales condiciones del terreno, tras los meses de verano climatológico hace que el suelo este necesitado de lluvia y la retenga con cierta facilidad. De este modo, gran parte del agua que cae es absorbida por este antes de que llegue a los cursos de agua o a los embalses. Además, con las situaciones de DANA las precipitaciones suelen ser muy intensas, pero localizadas, por lo que muchos embalses apenas varían sus niveles.

El estiaje es el período en el que un río, lago o cuerpo de agua alcanza su nivel más bajo, generalmente debido a la disminución de las precipitaciones o al aumento de la evaporación. Es un fenómeno común en climas con estaciones secas pronunciadas y ocurre típicamente durante el verano o al final de la temporada seca.

Cuando el suelo está saturado o tiene una mayor capacidad de retención de agua debido a períodos de lluvia previos, es más probable que las lluvias fluyan hacia los embalses y contribuyan a su llenado.

De esta manera y como algo positivo, estas últimas lluvias ayudarán a que las precipitaciones del otoño empapen mejor sobre el terreno y sean más efectivas.