¿Está el mar Adriático al borde del caos? El mucílago y las especies invasoras podrían provocar un gran desastre

El mar Adriático está recibiendo la llegada de numerosas especies exóticas, como el cangrejo azul, animales que hace años no se reproducían porque sus aguas eran demasiado frías. Hoy, encuentran aquí un hábitat perfecto.

Temperatura del mar Adriático
Temperaturas superficiales actuales en el norte del Adriático, donde se registran valores superiores a 30 °C desde hace semanas. Fuente: Modelo de referencia de Meteored.

Por su particular morfología, caracterizada por aguas muy poco profundas, el Adriático es sin duda una de las cuencas de la región mediterránea más afectadas por el cambio climático. El aumento de las temperaturas, con picos superiores a 30 °C, está transformando el Adriático en un mar tropical.

Esto puede parecer agradable para los turistas y los numerosos bañistas, pero no lo es para el ecosistema de estas aguas, que no es en absoluto tropical y, por tanto, está sufriendo un gran estrés y graves daños.

Las consecuencias de todo esto son la proliferación de muchas, quizá demasiadas, especies exóticas, como el cangrejo azul, animales que siempre han llegado a nuestras aguas pero que, hace años, no se reproducían porque el agua estaba demasiado fría. Hoy encuentran aquí un hábitat perfecto.

Mientras tanto, muchas especies de peces autóctonos están desapareciendo, y la acuicultura es cada vez más difícil de practicar debido al clima cada vez más extremo, año tras año.

Invasión de algas y mucílago

Las temperaturas demasiado altas provocan la proliferación de algas y mucílagos, una sustancia densa y viscosa formada por diversas microalgas que se acumula en el fondo marino o en la superficie. El periódico The Guardian ha informado de lo que está ocurriendo recogiendo testimonios de algunos vecinos de Fano, municipio de la provincia de Pesaro-Urbino.

Microalgas
Las temperaturas demasiado elevadas favorecen la proliferación de algas y mucílagos, una sustancia densa y viscosa formada por diversas microalgas que se acumula en el fondo marino o en la superficie.

Nos cuentan que a las 7:30 h de la mañana, la temperatura exterior ya ha alcanzado los 30 °C: «Han cambiado muchas cosas en 50 años. Recuerdo que antes el mar era mucho más bravo, pero ahora está casi todo en calma. La cantidad de peces también ha cambiado, y algunas especies ya ni siquiera existen», afirman. Este año se ha añadido el mucílago.

La última vez que esta sustancia hizo una aparición tan significativa en el Adriático fue en 1989, principalmente en las aguas de las ciudades costeras de Emilia-Romaña.

Su presencia había asustado a turistas y bañistas, pero aparte de la incomodidad de sentir la sustancia viscosa bajo los pies, la mucilagina no constituye un riesgo para la salud humana. Por desgracia, es muy peligrosa para la pesca.

Los moluscos están en peligro

Según los pescadores, la invasión de mucílagos está causando graves problemas a los motores de los barcos y atascando las redes de pesca. Las principales víctimas son los moluscos. Aunque la mayoría de las especies de peces consiguen evitar el mucílago, éste asfixia a los mejillones y las almejas, que también se ven amenazados por los cangrejos azules.

Se dice que en 40 años nunca se ha observado una temperatura tan alta, ni siquiera en mar abierto, donde también se alcanzan los 30 °C. Antes, el mucílago sólo era un problema durante uno o dos días, pero hoy persiste durante más de un mes.

Mar Adriático
Según Luca Mercalli, Presidente de la Sociedad Meteorológica Italiana, en términos de temperaturas, este año es el peor jamás registrado para los mares.

Los pescadores más grandes y mejor estructurados aún consiguen sobrevivir, pero los más pequeños e independientes, como los de Pesaro y la cercana ciudad de Cattolica, en Emilia Romaña, atraviesan graves dificultades. Todas las actividades están amenazadas, sobre todo por los elevadísimos costes y la compleja burocracia a la que hay que hacer frente.

El Adriático se convertirá en un mar cada vez más tropical

Según Luca Mercalli, Presidente de la Sociedad Meteorológica Italiana, desde el punto de vista de la temperatura, este año es el peor registrado en los mares, hasta el punto de que el consorcio Copernicus, que establece la escala de referencia de la temperatura, ha calificado la situación de «extrema».

Mercalli añade también que no hay ningún ciclo natural inevitable responsable; afirma que el ser humano tiene el 100% de la culpa. Concluye que cualquier inversión de la tendencia es imposible: lo único que cabe prever es una reducción del empeoramiento de la situación para evitar que la temperatura siga subiendo, haciéndose inmanejable para las generaciones futuras.