¿España renunciará a eliminar un millón de hectáreas agrícolas hasta 2040 para garantizar agua suficiente para todos?

La organización ecologista Greenpeace da la voz de alarma: de aquí a 2040 el país podría disponer de hasta casi un 7% menos de agua dulce. Garantizar agua suficiente pasa por iniciar ya un plan de reducción de macroregadíos.

Campos de cultivo en la Región de Murcia.

En España, 3 975 000 hectáreas de tierra se dedican a la agricultura, que en 2023 representó únicamente el 2,34% del Producto Interior Bruto (PIB) nacional pero que, sin embargo, requiere una ingente cantidad de agua para su sostenimiento.

Para atender todas sus demandas, en el país se consumen unos 29.000 hm3/año de este recurso finito. El 80%, unos 23200 hm³, se destina al riego de cultivos. Frente a este dato, toda el agua embalsada, a fecha 23 de septiembre de este año, era de 26855hm³. Son parámetros insostenibles.

Así las cosas, los distintos planes hidrológicos siguen proyectando aumentar los regadíos sin tener en cuenta que en el horizonte se dibuja un paisaje preocupante, dominado por la reducción de las precipitaciones necesarias para recargar embalses y acuíferos.

Entre un 4,04% y un 6,88% menos de agua de aquí al año 2040

Un reciente informe de la organización ecologista Greenpeace, elaborado en base a datos del Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (CEDEX), apunta a que, por los efectos del cambio climático, España dispondrá de entre un 4,04% y un 6,88% menos de agua de aquí al año 2040.

Las sequias cada vez más recurrentes y prolongadas y el aumento de las temperaturas, que conlleva un incremento de la evapotranspiración (ETP), serán la principal causa de la sirena de las reservas de agua dulce en el país.

Para mediados del siglo XXI, se esperan incrementos de la ETP cercanos al 10% en las cuencas más importantes, que en el último tercio del siglo seguirán aumentando, acercándose al 20%.

Por ello, para Greenpeace, España debería reducir entre un 20% y un 25% la superficie actual de regadío antes de 2040, lo que supone casi un millón de hectáreas, especialmente la dedicada a la agricultura intensiva. Un recorte necesario para afrontar el final de la década con disponibilidad de agua.

Otras demandas necesarias para garantizar agua para todos

En su informe, Greenpeace apunta algunas medidas que deberían adoptarse con urgencia para evitar el colapso hídrico que auguran los responsables de Agua de la organización:

  • Moratoria a los nuevos regadíos intensivos, para evitar que la superficie regable siga aumentando en España y que, además, va ligada a menudo a la roturación de montes.
  • Establecimiento por parte del Gobierno de una hoja de ruta para reducir 983 981 hectáreas de regadíos para el año 2040, especialmente los ubicados sobre zonas tensionadas por acuíferos en mal estado cuantitativo y químico, así como sobre zonas vulnerables a la contaminación por nitratos.
  • Reducción de los regadíos de grandes explotaciones ligadas a fondos de inversión y cultivos superintensivos, que no se adaptan a las condiciones climáticas.
  • Eliminación de todos los regadíos ilegales del país.
  • Congelación de la inversión en nuevos regadíos en todas las cuencas.
  • Revisión de los proyectos de modernización de regadíos para evitar que se usen como falsa justificación y solución para incrementar la superficie de regadío y prometer nuevos derechos de riego.
  • Desligar la modernización de regadíos del incremento de producción. Es necesario que el agua que ahorre con sistemas para la vuelta eficiencia a la red de drenaje natural.
  • Defensa y preservación de los caudales ecológicos.
  • Los costos de las nuevas inversiones en modernización de regadío o para conseguir más recursos hídricos a través de desalación-reutilización, no deben seguir subvencionándose, sino repercutirse íntegramente en los usuarios que las demanden. Especialmente si los beneficiarios de estas inversiones no son pequeños y medianos agricultores.
  • Reducir de forma progresiva la cabaña ganadera en intensivo en un 50% para 2030, para minimizar la demanda directa e indirecta de agua y también su contaminación.

Más cerdos que habitantes

Y es que, otro problema que afecta al sector primario respecto al consumo indiscriminado de agua es que, en España, hay comunidades como Cataluña o la Región de Murcia que tienen más cerdos que ciudadanos, y donde las macrogranjas siguen expandiéndose sin control.

Para dimensionar el problema, desde Datadista explican que una macrogranja con 7200 cerdos necesita al menos 31 millones de litros de agua al año, casi el doble que un municipio pequeño de unos 400 habitantes.

Por ello, otras organizaciones como Ecologistas en Acción apuestan por un modelo ganadero sostenible, basado en sistemas extensivos adaptados a los recursos de cada territorio, y de la mano de un menor consumo de proteína animal.

Referencia de la noticia:

https://es.greenpeace.org/es/noticias/agricultura-si-o-si-pero-no-asi/