Mañana 19 millones de personas estarán expuestas a avisos por el vendaval
Aunque las miradas están puestas en las nevadas del norte peninsular, antes tendremos un importante temporal de viento que afectará a la mayor parte de la Península, dando lugar a situaciones de riesgo en algunos puntos. Aquí describiremos qué zonas resultarán más afectadas y cuándo.
En las últimas horas, la borrasca Gérard ha comenzado a reforzar la advección de vientos del oeste que comenzó este pasado fin de semana. Con el paso del tiempo, la borrasca se irá desplazando hacia Europa y el viento irá poco a poco girando a noroeste. Sin embargo, este vendaval no perderá intensidad puesto que una segunda borrasca, Fien, se aproximará aún más al norte peninsular y contribuirá a incrementar la intensidad del temporal en todo el territorio.
La borrasca Fien tocará tierra al oeste de Francia y los vientos que dejará en España y Portugal serán de componente noroeste el martes, tras el paso de sus frentes. Las rachas superarán los 70 km/h y, por tanto, el umbral de aviso amarillo en casi todo el territorio a excepción del cuadrante suroeste peninsular, donde se producirán rachas fuertes (superiores a 40 km/h) pero sin alcanzar los niveles de aviso.
Sin embargo, hay zonas donde estos vientos serán aún más intensos: en el entorno de los principales macizos montañosos las rachas pueden superar los 90 km/h así como en Baleares y el cantábrico. De forma muy local, pueden incluso darse rachas huracanadas, próximas o ligeramente superiores a 120 km/h tanto en zonas de alta montaña como en puntos expuestos de la costa cantábrica.
Debe tenerse en cuenta que los vientos de ladera a sotavento de las montañas pueden acelerarse significativamente durante la madrugada de este martes, especialmente en los sistemas Central e Ibérico así como en otras zonas montañosas del sureste e interior de la Comunidad Valenciana.
Avisos naranjas en 10 comunidades autónomas
La intensidad de este temporal de viento superará por tanto el umbral de aviso naranja en amplias zonas del interior y este, lo que significa que una gran parte de la población estará expuesta a una situación de riesgo importante.
Cabe destacar que no será sólo el viento el que pueda producir daños materiales dispersos; como consecuencia de este fuerte flujo de noroeste, el oleaje significativo alcanzará los 8 metros en Galicia donde se ha activado un aviso rojo y rondará los 6 o 7 metros en las costas del Cantábrico. También puede alcanzar los 5 metros en torno a Baleares complicando la situación en zonas costeras.
En resumidas cuentas este temporal no llegará a ser extraordinario en cuanto a intensidad en términos generales, puesto que es una situación que suele producirse casi todos los años en esta región de Europa, pero tendrá un alto impacto por dos razones importantes: en primer lugar por ser el temporal más intenso de lo que llevamos de temporada, no habiéndose registrado uno semejante desde el invierno pasado, y en segundo lugar por afectar a zonas muy extensas a diferencia de otras situaciones anteriores de este otoño e invierno que han afectado a regiones más concretas de la Península.
Lluvia, nieve y deshielos
La subida de temperaturas de este lunes unida a estos fuertes vientos está provocando un rápido deshielo de las nevadas caídas el fin de semana en puntos del Sistema Ibérico y la Cordillera Cantábrica, lo que se está traduciendo en un incremento del caudal de los ríos. A partir de este martes, con la irrupción de aire frío, el deshielo cesará pero las nevadas ganarán protagonismo, siendo fuertes y persistentes en la Cordillera Cantábrica. Además, se extenderán con menor intensidad a otras zonas y podrían caer en cotas inferiores a 500 metros en puntos de la mitad norte durante el miércoles y el jueves. En algunos casos, debido a los fuertes vientos, podrán producirse ventiscas.