Enormes incendios en Canadá, el humo ahoga Montreal y ya ha llegado a Europa

Cientos de incendios forestales arrasan desde hace semanas enormes extensiones de terreno en Canadá, tanto en las regiones orientales como occidentales, obligando a decenas de miles de personas a abandonar sus hogares.

Además de quemar miles de hectáreas de vegetación, los incendios liberaron enormes cantidades de humo a la atmósfera en junio, con enormes consecuencias en ciudades como Nueva York, a cientos de kilómetros de distancia, donde la visibilidad se redujo enormemente y la calidad del aire alcanzó niveles alarmantes.

La situación varía en función de las condiciones meteorológicas locales, y en las últimas horas el humo de los incendios está asfixiando literalmente la ciudad de Montreal (Quebec), donde ayer se registró la peor calidad del aire de las grandes ciudades del mundo, según las autoridades.

La ciudad más poblada de Quebec alcanzó una calidad del aire "insalubre" el domingo 25 de junio, según IQAir, el índice de calidad del aire que hace un seguimiento de la contaminación en todo el mundo.

El problema es principalmente el polvo fino, y las autoridades están aconsejando a la población que limite las actividades al aire libre y utilice mascarillas, al tiempo que se han cerrado las piscinas y las zonas deportivas al aire libre. Todo ello se debe a los cientos de incendios que siguen activos.

El humo de los incendios llega a España

Pero la cosa no acaba ahí. El humo de los incendios canadienses se está desplazando hacia Europa en las últimas horas. La columna de humo que se desplaza hacia el oeste de Europa es importante, y está recibiendo la atención de los meteorólogos en estas horas.

En las últimas imágenes de satélite de este lunes 26 de junio de 2023, se puede apreciar el humo de los incendios canadienses ya ha alcanzado el noroeste de la Península Ibérica. En algunas zonas del noroeste el cielo ya comienza a estar algo turbio por este motivo.

Una temporada de incendios extrema en Canadá

La temporada de incendios en Canadá empezó este año antes de lo habitual y con un vigor inusitado, informa The New York Times, llevando la destrucción incluso a zonas donde no suelen producirse fuegos tan grandes, como Quebec. Millones de hectáreas se vieron afectadas por las llamas.

Los incendios son frecuentes en primavera y verano en gran parte de Canadá, pero suelen producirse en zonas remotas y poco pobladas. Este año la situación es bastante distinta, y es de una escala diferente a la del pasado.

Estos incendios son de dimensiones considerables, en gran número (cientos están activos ahora mismo) y se están produciendo en amplias zonas del país, cubriendo una superficie que ya es mayor que la quemada el año pasado, a pesar de que sólo estamos al principio del verano. Una primavera seca, ventosa y anormalmente cálida propició las condiciones ideales para la propagación de los incendios forestales.

A mediados de junio, el balance era de más de 2600 incendios individuales registrados y unos 15 millones de hectáreas quemadas. El año pasado se vieron afectadas 560 000 hectáreas en el mismo periodo, muchas menos que en este histórico y preocupante 2023.