El 64% de la población considera al cambio climático una emergencia
Más de un millón de personas fueron escogidas al azar en todo el mundo con la finalidad de conocer su percepción ante el cambio climático, así como las políticas para hacerle frente. Te contamos los resultados más destacados al respecto.
La iniciativa Voto popular por el clima (Peoples' Climate Vote en inglés) ha sido desarrollada por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Universidad de Oxford con el objetivo de conocer la opinión pública a nivel mundial respecto al cambio climático.
De acuerdo con un comunicado en la página del PNUD, la encuesta alcanzó a 1,2 millones de personas, abarcando 50 países con más de la mitad de la población mundial, incluidas más de medio millón de personas menores de 14 años. Además, los resultados han sido desglosados por edad, género y nivel educativo.
¿Cómo se aplicó la encuesta?
Cassie Flynn, narra que la encuesta climática fue distribuida alrededor de todo el globo a través de invitaciones únicas en aplicaciones de juegos. Si una persona jugaba Words with Friends, Angry Birds, Dragon City, Temple Run y Subway Surfers en lugar de la típica publicidad aparecía la encuesta, lo que desde su perspectiva produjo una enorme muestra aleatoria. Adicionalmente, se estima que los resultados pueden tener un pequeño margen de error de +/-2%.
El cuestionario hacía una simulación donde los encuestados asumían el papel de líderes mundiales con la opción de escoger políticas que podrían mantener el calentamiento global en 1.5°C. Si los partícipantes no tenían éxito, el calentamiento global subía por encima de 2 a 3 °C, incluso 5 °C, lo que provocaba un daño terrible para toda la vida en la Tierra, según el simulador, claro.
Resultados más sobresalientes
El 64% de las personas consideran que nos encontramos en una emergencia climática global. Regionalmente, el 74% de los encuestados en los pequeños estados insulares en desarrollo también lo confirman, 72% en los países de altos ingresos, 62% en los países de ingresos medios y 58% en los países menos desarrollados.
Bajo esta lógica, las preocupaciones climáticas se dan más en la población de países con una mayor contribución de emisiones, por lo que resulta necesario elevar el debate a aquellos que ya viven consecuencias por la crisis climática, incluso siendo menos creyentes de la emergencia.
Por otra parte, de 18 diferentes opciones de políticas públicas para hacer frente al cambio climático, se podía votar por tres opciones, siendo cuatro las más destacadas: la conservación de los bosques y la tierra; la inversión en energía solar, eólica y renovable; promover técnicas agrícolas favorables al clima e invertir en empresas y empleos ecológicos.
Se prevé que estos resultados lleguen a los mandatarios encargados de la toma decisiones con la finalidad de que conozcan la percepción de la población y pueda ser tomada en cuenta para las acciones apremiantes ante el futuro climático mundial. Finalmente, entre las reflexiones del reporte se menciona que el impulsor sociodemográfico más importante de la creencia en la emergencia y acción climática es la educación de una persona.