Encuentran el legendario "Endurance" tras más de un siglo hundido
Más de un siglo después de su hundimiento, una expedición encuentra los restos del buque Endurance, el famoso barco que sufrió uno de los naufragios más famosos del mundo. ¿Cómo lo han podido encontrar? ¿Cuál es su estado de conservación?
El Endurance, capitaneado por Ernest Shackleton, llevó a cabo en 1914 la Expedición Imperial Transantártica con el objetivo de alcanzar el Mar de Weddel. Una vez allí, su tripulación desembarcaría en la costa, cerca de la bahía de Vahsel, y emprendería una marcha transcontinental en dirección al mar de Ross, atravesando el Polo Sur.
Ernest y su equipo, esperaban convertirse en los primeros transeúntes en atravesar por tierra el continente antártico. Recorrerían, nada más y nada menos, que 2900 kilómetros a pie, donde casi la mitad del trayecto estaba aún sin explorar.
Lamentablemente la expedición no tuvo un final feliz. El Endurance nunca llegó a la Antártida, quedó atrapado en el hielo cerca de su destino final, en la Bahía de Vahsel. Finalmente, y tras 10 meses bloqueado, la presión de la banquisa aplastó al Endurance y acabó hundiéndolo por completo en noviembre de 1915.
¿Dónde y cómo han encontrado el navío?
Más de cien años después de su naufragio, los restos del Endurance han sido hallados ayer por una expedición del buque S.A Agulhas. El descubrimiento ha tenido lugar en la puerta de entrada de la Antártica, en el mar de Wedder, a una profundidad de 3000 metros y apenas a 4 kilómetros al sur de su posición registrada originalmente.
Endurance is Found pic.twitter.com/e8VxYhmUCb
— Endurance22 (@Endurance_22) March 9, 2022
Para llevar a cabo la misión, los investigadores han empleado vehículos híbridos de búsqueda subacuática, gracias a los cuales y con gran asombro, han descubierto que el barco se encontraba en condiciones óptimas.
¿Por qué han encontrado el barco en tan buenas condiciones?
Los investigadores han quedado atónitos tras avistar lo que quedaba del buque en buenas condiciones, tras pasar más de 100 años sumergidos en las frías aguas antárticas. El impresionante estado de conservación del barco se debe a la ausencia de microbios que se alimentan de madera en el lecho marino antártico y las frías y saladas aguas que lo rodean.
El océano Antártico está enriquecido en sal, debido al proceso de formación de hielo en el mar que produce la expulsión de salmuera. La sal aumenta la densidad del agua y esté se hunde, ocasionando que la Antártida posea las masas de agua más densas de los océanos. Además, su fondo marino tiene las aguas más frías del planeta, provocando que su agua fría y salada actúe como un buen conservante.