El tiempo de Navidad en España comienza a avistarse en los mapas: esto es lo que hoy prevé nuestro modelo de referencia

Aunque es pronto para conocer la previsión del tiempo para esta Navidad y es aventurarse mucho, ya podemos adelantar que los principales modelos meteorológicos divisan para España un período más bien seco y con temperaturas que se mantendrán en valores típicos en la mayor parte del territorio, pero también que habrá excepciones.

Las opciones de que haya precipitaciones en Navidad

Todo parece indicar que, al menos, tendremos un inicio de los días festivos sin mucha precipitación, ya que el anticiclón va a ganar fuerza sobre nuestro territorio a lo largo de la semana que viene y quizá continúe durante la última del año, ya de Navidad.

En el mapa presentado sobre estas líneas del modelo europeo se aprecia que el periodo comprendido entre Nochebuena y Navidad, extendiéndose hasta casi fin de año, podría estar marcado por condiciones secas o muy secas en el extremo occidental, sur y parte del este peninsular.

Por otro lado, en el norte las precipitaciones parece que sí se mantendrán en cifras habituales para esta época del año o incluso podrán ser más abundantes de lo normal en el litoral cantábrico, Pirineos y Baleares.

Al iniciar el año 2025, el modelo Europeo señala una continuidad en la tendencia hacia un inicio de año y una segunda mitad de la Navidad marcados por condiciones secas en gran parte del territorio español.

Todo apunta a unos días festivos con frío

El inicio de la Navidad va a ser algo frío, sobre todo en el centro y sur de la península, al menos esto es lo que hoy se aprecia en los mapas de anomalía de temperaturas (bajo estas líneas). También en Baleares. En el resto los valores parece que permanecerán cerca de lo normal para la época.

Todo apunta a que durante la segunda mitad de la Navidad las anomalías ligeramente negativas continuarán siendo protagonistas. Esto significa que podríamos comenzar el año 2025 con un ambiente más bien frío, aunque sin excesos, cerca de los rangos normales para la época.

Se puede intuir con estos mapas -y en el de anomalías de presión, que sugiere un anticiclón potente al oeste peninsular- que sobre todo en los valles el frío podría ser el resultado de nieblas persistentes, características de esta época del año. Estas nieblas, a menudo densas y duraderas durante el día, limitan significativamente el ascenso de las temperaturas.

¿Descartamos una 'blanca Navidad'?

Aquí esta ilusión viene heredada de otros países más septentrionales, donde la nieve sí aparece con regularidad en estas fechas. Las ciudades españolas no son muy nivosas, pero sí tenemos relieves importantes donde, si el frío acompaña, este meteoro aparece y permanece.

Con estos mapas en mano, al menos parece que en nuestras montañas permanecerá gran parte de la nieve caída en los últimos días, porque el frío sí podría acompañar. También la producida en las estaciones de esquí. La cordillera Cantábrica y Pirineos podrían acumular nuevos centímetros a tenor de las anomalías previstas, pero la incertidumbre es muy grande aún. En próximos días haremos predicciones más detalladas.

Lo que es habitual en los últimos años...

Aquí estas festividades suelen coincidir con alguno de los periodos más fríos del año, y durante los últimos años las precipitaciones han escaseado en prácticamente todo el territorio. Por ejemplo, han destacado más las nieblas en zonas del interior y puntos de los aledaños a los principales ríos españoles que los grandes temporales de lluvia y nieve.

Con esto sobre la mesa, se podría decir que lo más habitual en las últimas 10 navidades es que la atmósfera esté tranquila, lo que se traduce en heladas, sol al medio día y nieblas persistentes en puntos de valle.