El sorprendente Arroyo Turquesa: uno de los secretos mejor guardados de Argentina y que vale la pena conocer
Si, es real. El maravilloso Arroyo Turquesa existe y está en los Andes argentinos. Lo puedes encontrar tras 4 horas de camina... ¡pero es un esfuerzo que realmente vale la pena! Te contamos más sobre este alucinante lugar.
La primera vez que uno ve estas sorprendentes imágenes, puede que fueron modificadas digitalmente por alguna mano hábil. El Arroyo Turquesa es una de las maravillas naturales de Argentina. Se encuentra en el sudoeste de la provincia de San Juan, a unos 200 km de la capital provincial y a los pies del Cerro Mercedario, en la Cordillera de los Andes.
Las fotos y videos que resaltan su inusitado color, han hecho que sea uno de los destinos preferidos por los fanáticos del senderismo y turistas de todo el mundo.
A más de 4000 metros
Este pequeño curso de agua, se alimenta de los glaciares y las nieves permanentes del Cerro Mercedario, la cuarta cumbre más alta de América. Su altura (6720 metros) es objeto de debate, ya que no ha sido medido rigurosamente. El lecho del arroyo está ubicado a unos 4100 metros sobre el nivel del mar, unos 100 km al oeste de la localidad de Barreal.
El contraste del Arroyo Turquesa con las tonalidades marrones de los cerros y montañas que lo rodean, resalta la belleza de este curso de agua y lo han transformado en un punto único que, en el año 2018 fuera nominado para ser parte de las 7 Maravillas Naturales Argentinas, una iniciativa que buscó inspirar y concientizar sobre la conservación de las bellezas originarias de todo el país a través de la selección de siete íconos emblemáticos.
¿Por qué tiene ese color?
El color turquesa de sus aguas zigzagueantes tiene una explicación. Sus aguas vertientes adquieren ese tono por los minerales que contiene, en particular el cobre que al oxidarse adquieren esa tonalidad que las hace únicas en el paisaje.
Y además, las rocas se "tiñen" de turquesa. Y es que al depositarse los sedimentos minerales en el fondo del arroyo, dan esa sorprendente tonalidad a las piedras que lo atraviesan, y de esa forma se cubren gradualmente del azul del óxido de cobre.
La tonalidad del color turquesa puede variar dependiendo del día, y muchas veces depende del ángulo de incidencia de la luz solar. Pero independientemente de estas variaciones, resulta un espectáculo sorprendente para todo viajero.
El paraíso del senderismo
Si te has entusiasmado con las imágenes y decides visitar el Arroyo Turquesa, es fundamental que sepas que sólo se puede hacer de a pie.
Y es que una de las principales actividades que se realizan en este maravilloso lugar es el senderismo, donde además de coronar el paseo con la llegada al arroyo, en el camino recorrerás montañas y paisajes típicos de los Andes.
El recorrido se inicia en la localidad de Barreal. Se recomienda llevar poco peso y tener un buen estado físico para disfrutar de la caminata. Después de 4 h de caminata de baja dificultad e intensidad media, y tras atravesar el Río Los Patos y el Río Blanco, ambos cursos de agua permanente de deshielo donde se pueden pescar truchas, se llega a la Laguna Blanca (3000 metros).
A partir de aquí aumenta la pendiente. Tras unas 2 a 3 h de recorrido, se llega a la base del Glaciar el Caballito (4100 metros), donde se encuentra el nacimiento del Arroyo Turquesa, enclavado justo bajo el imponente cerro Mercedario. El regreso triunfal al campamento de la Laguna Blanca, solo tomará 2 h... pero la experiencia durará para siempre.