Este domingo será el solsticio ¡y llegará el invierno astronómico!

El próximo domingo a las 05:19 minutos -hora peninsular- daremos la bienvenida al invierno astronómico. Comienza la etapa más fría, pero no en todo el mundo, claro, en el hemisferio surjusto ahora arranca el verano. La estación durará 88 días y 23 horas, hasta el inicio de la primavera el 20 de marzo.

El invierno astronómico y climatológico, ¿lo mismo?

A tan solo 3 días del solsticio de invierno, el hemisferio norte se prepara para su día más corto. Esto ocurre cuando el Sol alcanza su máxima declinación Sur (-23º 27'), acompañado posteriormente de varios días donde su altura respecto a la Tierra no varía en las horas cercanas al mediodía.

¿Es lo mismo el invierno climatológico y el invierno astronómico? La respuesta es no. El invierno astronómico empieza justo en el día con menos horas de luz solar, y esto se hace por convención, sin atender a lo que nos cuenta el clima. Acabará en el equinoccio de primavera, tras poco menos de 89 días. Un dato curioso es que, por ejemplo, la ciudad de Madrid tendrá 6 horas menos de luz respecto al solsticio de verano -21 de junio-.

Por eso, en el campo de la meteorología y la climatología el invierno comienza el 1 de diciembre y termina el último día de febrero, seguido de la primavera -de marzo a mayo-, luego del verano -de junio a agosto-, y finalmente del otoño -de septiembre a noviembre-.

Para el invierno climatológico se tienen en cuenta estadísticas, variables como la temperatura y la precipitación. En cambio, desde el punto de vista astronómico, la llegada de las estaciones únicamente nos señala la distancia de la Tierra respecto al Sol. En este caso, diciembre a pesar de ser un mes invernal únicamente tiene 10 días dentro del invierno, mientras que marzo, usualmente más cálido, tiene alrededor de 20 días dentro de la estación más fría.

Los regalos astronómicos de la Navidad

Muchos de nosotros no podemos imaginar lo que es pasar la Navidad en manga corta. Para el hemisferio norte, lo normal es celebrar esta festividad alrededor del fuego y con muchas 'capas' de ropa sobre nosotros. Mientras tanto, en el hemisferio austral, justo todo lo contrario, hoy arranca el verano. ¿Imagináis una Navidad brindando desde la piscina?

Tanto el invierno como la llegada de estas fechas tan señaladas nos regalan muchas cosas: desde eclipses, hasta brillantes estrellas y constelaciones maravillosas. Comenzamos con el eclipse anular del Sol, el 26 de diciembre, aunque no será visible desde Europa. Después llegará la lluvia de Cuadrántidas, que tendrá su pico máximo el 3 de enero. También disfrutaremos de la Luna llena el 10 de enero, que coincidirá con el eclipse penumbral de la Luna, visible desde muchos puntos de Europa, África, Asia y Australia.