El inicio de febrero con menos nieve de este siglo en España, pero la situación dará un giro radical en unos días
Febrero ha comenzado con un panorama desolador en las principales cordilleras españolas, con la innivación en mínimos históricos para las fechas. Sin embargo, la situación probablemente cambiará dentro de unos días con la llegada de nevadas.
Estamos en los primeros días del mes de febrero, pero si contemplamos la situación actual en las principales cordilleras españolas parece que nos encontramos a mediados o finales de la primavera. La entrada de flujos subtropicales del suroeste y las temperaturas de récord de finales de enero se han llevado casi toda la nieve por delante.
Innivación en mínimos en España a principios de febrero
Y la pérdida de nieve se ha mantenido en estas últimas jornadas, ya que según el último informe de evolución de recursos nivales año hidrológico 2023-2024 del programa ERHIN (Evaluación de los Recursos Hídricos procedentes de la Innivación) de la Dirección General del Agua, perteneciente al MITECO, las reservas de nieve están por los suelos en nuestras montañas, mientras que los caudales de muchos ríos siguen siendo elevados por el deshielo de finales de enero y principios de febrero.
La superficie innivada total en España no llega a los 4000 km², de los cuáles más de 2900 se concentran en el Pirineo, mientras que la Cordillera Cantábrica no llega ni a los 1000 km². En Sierra Nevada la superficie cubierta de nieve baja hasta los 65 km², y si sumamos la innivación del Sistema Central y de la Ibérica, las cifras caen drásticamente hasta los 12 km². Desde luego, son valores muy bajos para la época.
La percepción no engaña: la situación actual de nuestras cordilleras es más típica de mediados o finales de primavera que de principios de febrero. Los datos del último informe de evolución de recursos nivales del programa ERHIN son aplastantes, y prácticamente no hay excepciones: bastante agua por los ríos por el deshielo (salvo en aquellos sectores azotados por la sequía) y muy poca nieve.
El peor inicio de febrero en el Pirineo desde que hay registros
De hecho, si comparamos la superficie o el porcentaje de suelo cubierto por nieve en la cordillera pirenaica para principios de este mes, probablemente estemos ante la menor superficie innivada desde que hay registros en el Pirineo oriental y en Andorra, mientras que en el sector occidental está siendo, de momento, de los peores años. Sólo en las cumbres se mantienen espesores que podríamos considerar como aceptables o decentes.
Hemos tenido otras temporadas en las que a estas alturas del invierno la innivación en nuestras montañas era escasa (para recuperarse en ocasiones en febrero o marzo), pero en los últimos años se está observando que la nieve dura muy poco, ya sea por la entrada de potentes y persistentes dorsales subtropicales o por la llegada de suroestes templados y cargados de humedad desde el Atlántico, que dejan mucha lluvia pero una cota por las nubes.
Debido a este panorama, las estaciones de esquí están resistiendo como pueden, ya que muchas de ellas están teniendo que recurrir a la nieve artificial y de promociones o actividades familiares. Algunas directamente han cerrado de forma temporal a la espera de las nevadas. Y como ya adelantamos en Meteored, llegan novedades en el tiempo, y en unos días volverá la nieve a nuestras cordilleras.
A partir del miércoles la nieve volverá a las montañas
Entre el miércoles y el viernes la cota estará muy alta, ya que las precipitaciones estarán asociadas a un flujo subtropical del suroeste, situándose en torno a 1700 m en el norte y por encima de los 2000 m en el sur, aunque con espesores que empezarán a ser de cierta entidad en las cumbres del Pirineo, entorno de Sanabria y en las cumbres de Sierra Nevada. No obstante, las nevadas llegarán a todas las cordilleras principales, pero en zonas altas.
Según nuestro modelo de referencia, de cara al fin de semana llegaría una masa de aire algo más fresca y podría producirse una ciclogénesis sobre el noreste peninsular, por lo que hablaríamos de nuevas nevadas en las montañas, con una cota que descendería de los 1000 m en puntos del tercio septentrional.
Hasta el domingo, los espesores podrían pasar del medio metro en el Pirineo aragonés y sector occidental del catalán, así como en cotas altas de Andorra. También en las principales cimas de Sierra Nevada. Serían más modestos en la Cordillera Cantábrica, Sistema Central, la Ibérica y en las Béticas. De todas formas, todavía hay un alto grado de incertidumbre respecto a la situación del fin de semana.
Parece que después entraría de nuevo la dorsal anticiclónica, con ascenso térmico e inversiones térmicas, por lo que las temperaturas de nuevo estarían por encima de la media en las montañas y volvería a irse parte de la nieve. Habrá que confiar en que en esta ocasión parece que la atmósfera estará más dinámica, por lo que las precipitaciones no tendrían que tardar mucho en volver.