El fenómeno de El Niño se está debilitando, pero seguiremos notando sus efectos en los próximos meses, advierte la OMM
El Niño empieza a debilitarse, ¡pero aún no ha terminado! Según la Organización Meteorológica Mundial, sus efectos seguirán sintiéndose en todo el mundo durante los próximos meses, hasta que alcancemos la fase neutra entre abril y junio.
La última actualización de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) indica que hay un 60% de probabilidades de que El Niño -la fase positiva del patrón de El Niño Oscilación Austral (ENOS)- persista durante el trimestre marzo-mayo y un 80% de probabilidades de que las condiciones ENOS sean neutras entre abril y junio.
Según la OMM, El Niño 2023-24 alcanzó su máxima intensidad entre noviembre de 2023 y enero de 2024, cuando la anomalía de la temperatura de la superficie del mar (TSM) alcanzó los 2ºC en la región Niño 3.4. Este evento se consolidó así como uno de los cinco El Niños más fuertes jamás registrados, más débil que los "superniños" registrados en 1997/98 y 2015/16
Durante el mes de febrero de 2024, tanto el océano como la atmósfera sobre el Pacífico tropical seguían indicando condiciones de El Niño, con una disminución principalmente de las anomalías positivas de la TSM sobre el Pacífico tropical, lo que indica que el fenómeno se está debilitando gradualmente. Por consiguiente, se espera que en los próximos meses siga influyendo en el clima mundial, aunque en menor medida.
En cuanto a La Niña en 2024, la OMM afirma que muchos modelos climáticos indican una posible transición de una fase neutra a La Niña entre los meses de junio y agosto, mientras que para este mismo periodo la probabilidad de un El Niño es muy baja (apenas un 10%).
Sin embargo, debido al rendimiento relativamente pobre de los modelos de predicción a largo plazo en esta época del año, conocida comúnmente como la "barrera de la predictibilidad primaveral" en el hemisferio norte, estas previsiones del ENOS deben interpretarse con cautela.
Los efectos de El Niño seguirán sintiéndose en todo el mundo
Incluso con el debilitamiento de El Niño y la consolidación de la fase neutra del ENOS en los próximos meses, seguimos esperando los impactos de El Niño hasta al menos mediados de 2024. Según la OMM, El Niño suele tener su mayor impacto en el clima mundial en el segundo año de su desarrollo, en este caso 2024.
El Niño no ha sido el único patrón de anomalías positivas de la temperatura superficial marina que ha destacado en los últimos meses; las TSM en otras partes del globo han sido extremadamente altas durante los últimos 10 meses.
La combinación de la continuación de El Niño, aunque más débil, y las temperaturas superficiales del mar por encima de lo normal previstas para la mayor parte de los océanos del planeta dará lugar a temperaturas por encima de lo normal en casi todas las zonas terrestres durante los próximos tres meses.
Este calor atrapado por los océanos alimentará el calor atrapado en la atmósfera, por lo que diversos modelos climáticos prevén temperaturas superiores a las normales en prácticamente todo el planeta entre marzo y mayo, especialmente en amplias zonas continentales del hemisferio sur.
En cuanto a las precipitaciones, el régimen previsto para los próximos tres meses (de marzo a mayo) sigue siendo similar a algunos de los regímenes pluviométricos asociados a El Niño, como un régimen más seco sobre la Amazonia, el norte de Australia y el sur de África, mientras que algunas zonas de sur de Brasil, el este de África y el sur de Estados Unidos registrarán precipitaciones superiores a lo normal.