Un espeluznante lago que convierte a los animales... ¡en piedra!
En el corazón de África se encuentra un lago que ha dado lugar a numerosas supersticiones, que bien podrían pasar por cuentos o leyendas de Halloween. ¿Por qué los animales quedan petrificados?¿Hay algún truco?
A veces algunos fenómenos naturales pueden ser más aterradores o sorprendentes que los cuentos y las historias que se suelen contar en Halloween, aunque en muchas ocasiones es necesario separar la realidad del mito. Un buen ejemplo lo encontramos en el corazón de África, en el Valle del Rift, donde existe un lago que supuestamente convierte en piedra a los animales. ¿Hasta qué punto es cierto esto?
Se trata del lago Natrón, situado en el norte de Tanzania, y muy cerca de la frontera con Kenia, en unas tierras inhóspitas y alejadas de la civilización. Su extensión supera los 1000 km2, y el color de sus aguas va variando a lo largo del año, pasando del blanco al rosa y al marrón. Su tamaño también presenta oscilaciones dependiendo de la época del año, y por ejemplo durante la estación seca la lámina de agua retrocede tanto que grandes extensiones de terreno quedan cubiertas por una gruesa corteza de sal.
Unas aguas extremadamente peligrosas
Precisamente, estas tonalidades del agua dan una pista de que no estamos ante un lago normal. El lago Natrón está alimentando por una serie de surgencias (manantiales) que presentan un nivel de salinidad muy alto, cuyo origen se encuentran en el cercano estratovolcán Ol Doinyo Lengai. La temperatura del agua supera los 40 ºC, y en algunos momentos puede acercarse a los 60.
En sus aguas se encuentran una serie de compuestos químicos, como las cianobacterias, que son las responsables del color rojo del lago. Además, posee un elevadísimo contenido en carbonato de sodio, que surge de los géiseres. Se estima que presenta unos niveles de Ph en torno a los 10 y los 12 (normalmente, el Ph neutro en agua oscila entre 7 y 8, frente al pH 5,5 de la piel humana). Si la piel de algún animal entra en contacto con el agua, sufre importantes quemaduras, y también pueden perder la visión si los ojos se ven afectados.
Animales momificados
Por todo esto han surgido numerosas leyendas y supersticiones en torno al lago, ya que recibe su nombre de la misma sustancia (el natrón o "sal divina") con la que secaban las momias en el antiguo Egipto. Sólo algunos flamencos enanos o la tilapia alcolapia (un pez endémico) se aventuran a acercarse a este lago.
El lago Natrón se hizo famoso hace unos años tras una serie de polémicas fotografías realizadas por Nick Brandt. Este fotógrafo encontró numerosas aves y otros animales muertos en las orillas del lago. Lo más peturbador es que se encontraban perfectamente momificados, debido a las características químicas del agua.
Sin embargo, hay que añadir que Brandt situó a estos animales convertidos en "piedra" como si hubieran muerto en ese preciso momento, con el objetivo de aumentar el impacto. Los animales no se acercan al lago, y la mayoría de los que han muerto (aves principalmente) ha sido por chocar contra sus calmadas aguas debido al perfecto reflejo que hacen del cielo. Por tanto, hay algo de "trampa" en esta historia.
El lago, cada vez más amenzado
Precisamente, la fama que ha generado el lago Natrón ha provocado la aparición de riesgos que ponen en peligro su conservación. A pesar de estar ubicado en una zona inhópsita, sus características minerales son utilizadas con el objetivo de extraer sosa con fines comerciales. Además, es un espacio cada vez más frecuentado por los turistas y son cada vez más las visitas guiadas que se organizan en esta zona, lo que provoca que haya una presión cada vez mayor en este paraje tan singular.