Día Europeo de los Parques, ranquin ¡lo más de los más!
Este 24 de mayo se celebra el Día Europeo de los Parques Nacionales. Veamos a continuación cuáles son los más grandes, los más antiguos y cuánto les afecta el cambio climático.
El Día Europeo de los Parques Nacionales se celebra el 24 de mayo para conmemorar el día del nacimiento del primer parque natural de Europa, declarado tal fecha de 1909 en Suecia. En otras partes del mundo se celebra el 24 de agosto bajo el nombre del Día Mundial de los Parques Nacionales.
Este año el lema europeo “Nature is our business” se ha traducido como “La Naturaleza. Nuestro negocio, nuestro compromiso” para hacer énfasis en el papel fundamental que estas áreas protegidas juegan en la conservación de la naturaleza y las oportunidades que ofrecen para la sociedad.
Lo más de los más
En el mundo, el primer parque Nacional se fundó en 1872 en Estados Unidos, con el nombre de Yellowstone y con una superficie aproximada de 900.000 hectáreas (ha). En Europa fue Suecia la pionera y en 1909 se creó el parque de Hamra, junto a otras ocho zonas protegidas. Hamra solo se extendía unas 29 ha, poco que ver con las 1.383 que tiene en la actualidad.
En España tuvimos que esperar hasta 1918, cuando se creó el primer parque nacional, con el nombre de Montaña de Covadonga, con 16.925 ha, actualmente denominado de los Picos de Europa y con una extensión de 67.455 ha. Ahora tenemos 16 parques, contando con la última adquisición, el Parque Nacional de las Nieves en la provincia de Málaga. El más grande de nuestro país es el de Sierra Nevada en Granada, con 86.210 ha. En la actualidad España dispone de unas 400.000 ha protegidas dentro de los parques nacionales, aproximadamente el 0.7% de su superficie; que se quedan muy cortas si las comparamos con el tamaño del mayor parque nacional del mundo, el de Groenlandia o del Nordeste de Groenlandia, con una extensión de 97 millones de ha, casi el doble de la superficie total de nuestro país.
El cambio climático
El Parque Nacional del Valle de Ordesa o del río Ara fue la denominación inicial del segundo parque de España, también de 1918, actualmente conocido como de Ordesa y Monte Perdido.
En él se encuentra uno de los últimos glaciares de los Pirineos, que a su vez son los más meridionales de Europa, el de Monte Perdido, del tipo de montaña, suspendido sobre una gran pendiente entre los 2.700 y los 3.250 m. de altitud en la cara norte de este pico.
Debido a la situación actual de calentamiento generalizado se encuentra en vías de desaparición. A lo largo del pasado siglo XX la parte inferior ha ido ascendiendo en altura, apreciándose una clara disminución de la cascada de hielo que la unía con la parte superior. En 1973 esta cascada terminó fundiéndose y desde entonces están separadas ambas masas de hielo.
En la actualidad se calcula que tiene una superficie de 32 ha, con una longitud de 750 metros y un espesor de 50 metros. Siendo una de las partes más sensibles al actual cambio climático y esperándose su desaparición como glaciar, masa de hielo con movimiento propio, en unas decenas de años.