¡Despertemos! La temperatura global no deja de aumentar. ¡Actuemos ya!
La NOAA (Administración Nacional Oceánica y Atmosférica), que depende de los Estados Unidos, ha lanzado un nuevo mensaje de alerta: nuestro planeta ha registrado en abril su segundo mes más cálido de la historia.
Estamos ante una situación límite, un momento de verdadera emergencia climática. En los últimos tiempos el concepto de 'crisis climática' está empezando a calar entre nuestros representantes políticos y la sociedad civil. El ejemplo de la estudiante y activista sueca Greta Thunberg con su movimiento Fridays for Future está despertando conciencias.
La temperatura media planetaria sigue in crescendo
La temperatura global del mes de abril de 2019 estuvo 0,9 ºC por encima del promedio del siglo XX para el mismo mes. Atención, porque se trata del segundo mes de abril más cálido desde 1880, que es cuándo se iniciaron los primeros registros instrumentales. Lo más preocupante no es este dato en concreto, que también, sino que son ya 412 meses consecutivos con una temperatura por encima de la media climática.
Los datos climáticos en números
Como decíamos, no es una excepción abril, puesto que es extrapolable al resto de meses y desde
enero la temperatura global es 0,8 - 0,9 ºC superior a la media. Los récords de temperaturas cálidas para estos primeros cuatro meses tuvieron lugar en Australia, sureste de Brasil, Asia central, el Atlántico sur o el suroeste de India, entre otros lugares.
El Ártico, en grave peligro
La superficie de hielo del Ártico se ha visto reducida en abril un 8,4% respecto al período 1981-2010. Este pasado mes tiene el triste récord de alcanzar su mínimo histórico con 13,5 millones de kilómetros cuadrados (km2).
Abril ha sido el decimoctavo abril consecutivo con una superficie por debajo de la media climática según los cálculos efectuados por la NOAA y la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA). Estos datos ponen de manifiesto que el calentamiento global es imparable.
Así mismo, la Antártida también ha sufrido un retroceso del 16,6% de su extensión helada siendo el tercer abril con menos superficie de la serie climática: 5,7 millones de km2.
No tenemos margen de error, no tenemos planeta B
El cambio climático es una realidad. Estamos sufriendo sus efectos en forma de inundaciones, sequías, episodios de calor… y, ante esto, hay que llevar a cabo medidas eficaces y concretas para combatirlo.
España y el resto de estados miembros de la Unión Europea deben ser más ambiciosos en la reducción de gases de efecto invernadero (GEI) para 2030. El objetivo es reducir entre un 40% y un 55% los niveles de GEI respecto a 1990 e iniciar así firmemente el proceso hacia una transición ecológica.