Tierras raras: descubren en Noruega el mayor yacimiento de Europa. ¿Es el principio del fin de la dependencia exterior?
Según el grupo minero Rare Earths Norway, con 8,8 millones de toneladas, este depósito de tierras raras descubierto en el sureste de Noruega sería el más grande de Europa.
El jueves 6 de junio, un grupo minero noruego anunció una nueva estimación de la cantidad de tierras raras disponibles en el depósito de Fensfeltet. Según Rare Earths Noruega, este depósito situado en el sureste de Noruega contiene 8,8 millones de toneladas de estos metales esenciales para la transición verde.
Es considerablemente más grande que el depósito de Kiruna en Suecia, que fue identificado en enero de 2023 y se estima que contiene entre 1 y 2 millones de toneladas. Cuando se descubrió, se pensaba que era el más grande de Europa.
A pesar de su alta abundancia relativa, los minerales de tierras raras son más difíciles de extraer que fuentes equivalentes de metales de transición, debido en parte a sus similitudes químicas. Esta dificultad hace que los metales de tierras raras sean relativamente caros, por lo que su uso industrial fue limitado hasta que se desarrollaron técnicas de separación de alto rendimiento en las décadas de 1950 y 1960.
La importancia de las tierras raras en nuestro mundo
Las tierras raras o metales de tierras raras son, según la clasificación de la IUPAC, un grupo relativamente abundante de 17 elementos químicos, de los cuales 15 pertenecen en la tabla periódica de elementos al grupo de los lantánidos, a los que se añade el escandio y el itrio, elementos que se encuentran en el grupo de los lantánidos en los mismos minerales y tienen propiedades fisicoquímicas similares.
Sin estos 17 elementos no habría transición energética, sociedad digital ni tecnología de vanguardia. Sin las tierras raras, regresaríamos a la década de 1960 y la actividad económica sería mucho más lenta. Estos elementos estratégicos y esenciales para la industria son fundamentales en el sector energético, que los necesita tanto para producir energía como para almacenarla y consumirla.
Las tierras raras contienen propiedades magnéticas y ópticas que las hacen indispensables para la fabricación y la electrónica de alta tecnología. Estos elementos (escandio, itrio y el grupo de los lantánidos) se encuentran en el mismo suelo. Los contienen el vidrio, la cerámica, los barnices, los láseres, las lentes de las cámaras y los telescopios.
Uso de tierras raras en Europa
Varios gobiernos europeos han modificado sus leyes de minería, exigiendo sesiones públicas de aclaraciones o prohibiendo la investigación en lechos de ríos y márgenes de aguas superficiales, entre otras restricciones. Esta fue una señal clara para la industria de que el futuro no implicará actividades extractivas.
¿Se comenzará a explorar y extraer este descubrimiento?
Las estimaciones, realizadas con el apoyo de la empresa WSP, indican que en el lugar se encuentran, entre otras cosas, 1,5 millones de toneladas de imanes permanentes, materiales magnéticos utilizados en coches eléctricos y turbinas eólicas.
Según Rare Earths Norway, la exploración minera podría comenzar en 2030, con una inversión de 10000 millones de coronas (867 millones de euros) sólo para la primera fase. La empresa también afirma que su objetivo es contribuir a una cadena de valor total y compacta, desde la mina hasta el imán, con un impacto climático y ambiental considerablemente reducido.
Amargada por su dependencia energética de Rusia antes del estallido de la guerra en Ucrania, la Unión Europea (UE), de la que Noruega no es miembro pero con la que mantiene estrechos vínculos, busca ahora emanciparse en el ámbito de los metales raros.
Actualmente, el 98% de las tierras raras utilizadas en la UE se importan de China, que tiene prácticamente un monopolio en el sector. Actualmente no hay ninguna mina de tierras raras en funcionamiento en el continente, ya que su extracción es altamente contaminante a nivel local.