¿Cuántas toneladas de basura dejan las fiestas en las calles de España? Cuantificamos la vergonzosa 'cara B'
Bilbao está de fiesta después de que el Athletic Club haya ganado la 25º Copa del Rey. Un millón de personas se concentraron este jueves para contemplar el esperado paso de La Gabarra.
Un momento glorioso para los aficionados que, sin embargo, se ha visto empañado por el rastro de botellas, plásticos y todo tipo de desperdicios que han inundado, literalmente, los márgenes de la ría.
Algunas personas han denunciado esta dolorosa -y costosa- manifestación de incivismo en las redes sociales, al tiempo que han hecho una llamada a la reflexión colectiva a la que nos sumamos.
Porque, desgraciadamente, lo sucedido en Bilbao no es una excepción. Esta es la triste (e insostenible) 'cara B' de las fiestas más emblemáticas de nuestra geografía.
La fiesta del Orgullo en Madrid
Hasta 1.400 efectivos municipales y 600 medios mecánicos tuvieron que afanarse tras las celebraciones del Orgullo LGBTIQ+ 2023 para devolver un óptimo estado de salubridad a las calles del centro de Madrid.
El operativo extraordinario de limpieza incluyó, además, la colocación de 2.800 sanitarios químicos, 350 papeleras de aro en las zonas de influencia y 900 contenedores extra.
Este gran festival con el que se celebra y se muestra la diversidad, y que es un referente europeo para el colectivo, tiene también su lado negativo. El año pasado, se acumularon en la vía pública casi cuatro toneladas de residuos.
Sólo el día grande, en el que se celebra la gran manifestación, se tiraron 67.820 kilos de desperdicio. El único dato esperanzador es que, globalmente, en lo relativo a la producción de basura, la cifra del Orgullo 2023 fue un 15% inferior a las celebraciones de 2022.
Los Sanfermines, en Pamplona
En el Casco Viejo de Pamplona los Sanfermines de 2023 se saldaron con la generación de más de 1.200 toneladas de residuos, lo que supuso sólo un 2,44% menos que la cantidad de 2022.
Según datos de la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, de los 1.242.200 kilos que constituyen la cifra total, 357.220 kilos correspondieron a la recogida en contenedores (0,83 % menos que en 2022) y 558.840 kilos a la de vidrio (10 ,13% menos que en 2022).
El resto, 326.140 kilos, fue retirado de las calles por el servicio de limpieza del Ayuntamiento de Pamplona. Y fue un 11,98% superior respecto a los Sanfermines inmediatamente anteriores.
El coste de este operativo extraordinario de limpieza para el consistorio pamplonés, que duró apenas una semana, alcanzó los 500.000 euros. Una cantidad superior a la presupuestada para la construcción del nuevo Centro de Salud del barrio de Erripagaña (467.400 euros).
Las Fallas de Valencia
De poco sirvió la lema escogida por el Ayuntamiento de Valencia para la Capitalidad Verde Europea: "Contigo, estas fallas, València más limpia, más verde".
Este 2024, los residuos generados en la capital levantina se han multiplicado exponencialmente. Entre el 12 y el 19 de marzo pasados, los servicios municipales de limpieza y las diferentes contratas municipales se vieron obligados a retirar un total de 8.000 toneladas de desechos.
Es un incremento de casi un 6% respecto a 2023. Sólo en la Nit de la Cremà, que contó con un amplio dispositivo especial, se generaron un total de 2.100 toneladas de cenizas y residuos.
Para afrontar estas tareas, el Ayuntamiento de Valencia tuvo que emplear cerca de 1.900 operarios que trabajaron en tres turnos. Además, el presupuesto de limpieza para estos días se incrementó un 41% hasta alcanzar la mareante cifra de 2,7 millones de euros.
Esa cantidad es mayor a la que invertirá la Generalitat valenciana durante cuatro años en proyectos de investigación en biotecnología de la Universidad Miguel Hernández.
Están relacionados, por ejemplo, con el estudio de la hormona 17beta-estradiol en diabetes, las complicaciones neurocognitivas en la cirrosis hepática, el desarrollo de nuevas vacunas para combatir los virus en los niños o la evaluación de la inflamación en procesos de envejecimiento.
Las fiestas de San Juan en Alicante
En Alicante, la noche de las hogueras de la celebración de San Juan se saldó el año pasado con la retirada de casi 5.000 toneladas de residuos. Una cifra que supera en mil la cantidad de 2022 y que tiene un peligro especial: muchos de los plásticos acaban en el mar.
La situación no es exclusiva de la ciudad de Alicante. Para devolver la normalidad a sus playas tras la noche de San Juan, en Málaga 218 trabajadores tuvieron que retirar 37,4 toneladas de residuos, más del doble que el año anterior.
Con la campaña 'Estas Hogueras queremos ponerte verde', Ecovidrio, junto a la Generalitat Valenciana y el Ayuntamiento de Alicante, trataron un año más de fomentar el reciclado de envases de vidrio durante la celebración de las fiestas.
El reto sostenible era conseguir reciclar 400 kilos de vidrio al día. Y el premio, el sorteo de una paella gigante para 300 personas para las asociaciones de Hogueras y Barracas más comprometidas con su entorno.
La buena noticia es que, de los 137 colectivos participantes en la campaña, 97 superaron el reto. En total, consiguieron reunir 50.000 kilos de vidrio.
Vista la realidad, nuestro país necesita realizar una apuesta a largo plazo para evitar que las fiestas, algo tan español, impacten de un modo tan negativo en el medio ambiente. ¿La clave? Educar, educar y educar. Eso, y algo tan sencillo como llevarte tu propia basura para tirarla donde corresponda. Se supone, queridos jóvenes, que sois la generación más preparada de la historia.