¿Cuál es el futuro de la Albufera de Valencia tras la DANA? El pronóstico del geógrafo Enrique Moltó

La Albufera de Valencia, uno de los humedales más importantes de España, se encuentra en un estado crítico tras las catastróficas inundaciones que produjo la DANA de finales de octubre.

La Albufera de Valencia, el icono valenciano natural por excelencia con más de 23 kilómetros cuadrados y rodeada por 223 kilómetros cuadrados de arrozales, es uno de los espacios naturales más emblemáticos de España y ha sufrido grandes impactos tras las catastróficas inundaciones de la DANA de finales de octubre.

Cabe recordar que este laguna litoral es hogar de numerosas especies de aves, peces y flora acuática, y su valor ambiental es reconocido internacionalmente, formando parte de la Red Natura 2000 y declarada Parque Natural en 1986.

Sin embargo, debido a las recientes inundaciones, en estos momentos se enfrenta a una serie de amenazas críticas que comprometen su equilibrio natural y su sostenibilidad a corto plazo. El Doctor en Geografía Enrique Moltó abordó este asunto en las oficinas centrales de Meteored.

La DANA ha generado un grave problema de contaminación en la Albufera

La DANA que afectó a Valencia hace aproximadamente un mes no sólo dejó imágenes desoladoras en aquellas poblaciones azotadas por las riadas y las lluvias torrenciales. La Albufera ayudó a laminar la gran avenida, pero a cambio sufrió daños ambientales muy graves, según diversas asociaciones ecologistas, por lo que es vital la implantación de varios planes de recuperación del humedal.

En el vídeo que se puede ver en la cabecera de esta noticia, Enrique Moltó, geógrafo de la UA, destaca un par de conceptos de los que se está hablando estos días sobre los efectos de las lluvias torrenciales en el humedal.

"Nos preocupa a corto plazo la contaminación química y todos los procesos de contaminación que tienen que ver con el hombre, que generan un problema ambiental muy grave al no ser un proceso natural", afirma Moltó.

El profesor Enrique Moltó es también uno de los coordinadores del Máster en Planificación y Gestión de Riesgos Naturales de la Universidad de Alicante, el primero de este tipo en España

El humedal ha recibido grandes cantidades de fango y residuos arrastrados por las riadas, y en esta ocasión los vertidos de objetos de todo tipo ha sido muy destacable por la magnitud de la avenida. Según el geógrafo de la Universidad de Alicante, "todo lo que se encontraba en casas, calles, etc., ha acabado en la Albufera".

La fuerza del agua arrastró todo tipo de materiales a lo largo de kilómetros, depositándose muchos de ellos en el entorno de la Albufera.

Esto incluye no solo sedimentos, que es lo normal y natural en este tipo de crecidas, sino también restos urbanos, plásticos, productos químicos y otros contaminantes que alteran el frágil equilibrio de este ecosistema. Por tanto, es imperativo que se lleve a cabo una gran actuación de limpieza y regeneración desde ya para no comprometer el futuro de la laguna en el futuro más inmediato.

La colmatación del humedal: un destino geológico inevitable a largo plazo

Por otro lado, hay que hablar del proceso de colmatación. En estas riadas extraordinarias han llegado grandes cantidades de sedimentos que han teñido de marrón la Albufera. Aquí ya hablamos de una situación en la que el ser humano originalmente no tenía nada que ver, pero en las últimas décadas hemos modificado esto debido a la construcción de grandes presas.

¿Qué es la colmatación?
Se trata de un fenómeno natural que ocurre cuando un cuerpo de agua, como un lago, laguna, embalse o humedal, se rellena progresivamente de sedimentos, lo que reduce su profundidad y, finalmente, acaba transformándose en tierra firme.

Este proceso natural definirá el futuro de la Albufera a largo plazo. "A medio y largo plazo, va a ser una situación de colmatación la que se puede dar por procesos físicos de erosión a base de la sucesión de riadas", explica Moltó.

Esto implica que el lago se llenará progresivamente de sedimentos arrastrados por el agua desde los diversos barrancos que desaguan en la laguna litoral. Además, Moltó subraya también los posibles impactos de temporales marítimos cada vez más intensos, que pueden alterar la dinámica de este humedal.

A lo largo del tiempo, este fenómeno geológico podría transformar la Albufera en un espacio terrestre, eliminando su característica de lago litoral. Este ha sido y será el destino natural de muchos humedales similares en la costa mediterránea, convertidos en algunos casos en marjales o llanuras aluviales, ocupados posteriormente por urbanizaciones que en la actualidad constituyen espacios problemáticos por inundaciones frecuentes.