Nuestro modelo prevé un ciclón con rasgos tropicales "cerca" de España
Tras varias semanas completamente inactiva, la hasta ahora tranquila temporada de huracanes puede despertar de una forma un poco inusual, favorecida por las elevadas temperaturas de algunos sectores del Atlántico Norte.
El Atlántico ha pasado algo más desapercibido en cuanto a anomalías térmicas se refiere. Este verano, el extraordinario calentamiento del Mediterráneo ha puesto el foco de atención al este de la Península Ibérica, y tanto su evolución como sus posibles consecuencias son objeto de debate estas semanas. Sin embargo, de forma progresiva, el Atlántico próximo también ha ido experimentando un calentamiento que ya es bastante inusual y persistente en algunas zonas.
"Según prevén los modelos, una baja de tipo subtropical puede intensificarse en medio del Atlántico de aquí a cinco días. Actualmente, el Centro Nacional de Huracanes le da una probabilidad de treinta por ciento a 48 horas y un 50% a cinco días. Si se forma un huracán en medio del Atlántico, en pleno septiembre, no sería sorpresivo porque las aguas están muy cálidas y la cizalladura del viento en la zona es muy baja. El posible ciclón subtropical podría llegar incluso a ser un huracán y desplazarse hacia el este pero lejos inicialmente de la península".
En el entorno de la Península Ibérica las temperaturas de la superficie del agua son algo más normales, tan sólo destaca como anormalmente cálido el Cantábrico, especialmente en su sector oriental. Sin embargo, a medida que nos desplazamos hacia el oeste vamos encontrando anomalías cada vez más significativas hasta volverse extraordinarias en torno al paralelo 40º, con valores que oscilan entre 3 y 5 ºC por encima de los valores normales.
Con la formación de algunas ondas tropicales en latitudes sobtropicales y el aislamiento de alguna baja en latitudes medias, los modelos están empezando a desarrollar escenarios cuanto menos peculiares de cara a los próximos días, en los que sistemas tropicales, subtropicales y transiciones de todo tipo tienen lugar no sólo en latitudes bajas, sino también en el entorno de las Azores.
"Uno de los sistemas tropicales que se está vigilando se localiza en el centro de la cuenca, a una latitud más alta de lo habitual y las trayectorias previstas por los modelos lo dirigen en su mayoría hacia Europa, sin descartar que pueda acercarse o incluso llegar hasta la Península. A falta de ir viendo cuál es su evolución, es llamativo que se repita un patrón (trayectoria retrógrada) que hemos visto las últimas temporadas. La presencia de aguas más cálidas de lo normal en el Atlántico Norte son el caldo de cultivo ideal en zonas históricamente desfavorables, pero que cada vez lo son menos".
Algunos de estos sistemas desarrollados son "artifacts" o ciclones ficticios que el modelo no es capaz de simular adecuadamente en un entorno inestable y a plazos largos. Sin embargo, otros sí parecen una posibilidad bastante real y factible.
Nuestro modelo hoy ha sorprendido con esto: un posible ciclón con características tropicales en latitudes medias, "cerca" de la Península Ibérica.
— Meteored | tiempo.com (@MeteoredES) August 31, 2022
El @NHC_Atlantic lo está siguendo. Y nosotros también. pic.twitter.com/puBWq03tLE
El IFS de ECMWF, nuestro modelo de confianza, ya desarrolla algunos de estos sistemas durante este fin de semana y la semana que viene. Concretamente, ve posibilidad de desarrollo a lo largo de la próxima semana en dos ondas que pasarán por Cabo Verde: otra ya activa en el Atlántico occidental y una más en latitudes medias, al oeste de las Azores. Esta última será la que quede situada más al norte con diferencia, fuera de latitudes tropicales, pero sobre aguas anormalmente cálidas.
Tres de estos sistemas ya están siendo monitorizados por el Centro Nacional de Huracanes (NHC) y cuentan con probabilidades de desarrollo de entre el 40% y el 80% a lo largo de los próximos 5 días. Destaca especialmente por su ubicación la formada al oeste de Azores, que podría tener un desplazamiento hacia el este, extratropicalizándose a largo plazo cerca del continente europeo. No obstante, todavía quedan varios días para conocer con detalle la evolución de este sistema y, de desarrollarse, las zonas que se verán afectadas por él y su extratropicalización.