¿Por qué los lagos de los Pirineos y de los Alpes están cambiando de color?
La tonalidad de los lagos de los Pirineos y de los Alpes está cambiando con el tiempo debido a factores como nutrientes, sedimentos, vegetación y, sobre todo, por culpa de la contaminación.
El cambio climático está alterando, también, el color de los lagos de nuestro planeta. Hay investigaciones recientes que indican que varios lagos, como los de los Pirineos y los de los Alpes, famosos por su tonalidad azul, están tornando a tonalidades marrones y verdosas.
Existen muchos factores relacionados con la alteración en la coloración lagos, pero la mayoría de ellos, finalmente, tiene que ver de alguna manera con la transformación climática que experimenta la Tierra.
Cambio cromático de los lagos por temperatura del aire
Científicos de la Universidad de Carolina del Norte analizaron exhaustivamente 5,14 millones de imágenes satelitales de embalses de agua dulce entre 2013 y 2020, abarcando 85.360 cuerpos acuáticos en todo el mundo. Descubrieron que sólo el 31% mantiene actualmente su tonalidad azul, mientras que el 69% exhibe un tono marrón verdoso.
Contrario a la creencia previa que achacaba el cambio de coloración a los sedimentos y algas, este estudio ha revelado que la temperatura del aire, la precipitación, la altitud y la profundidad del embalse son también factores clave que determinan el color del agua a lo largo del tiempo. Este detallado análisis ha redefinido la comprensión de los cambios cromáticos en lagos y embalses a escala mundial.
El problema de las algas en los lagos
Los lagos más azules, característicos de regiones frías y de profundidades considerables, se ven amenazados por el cambio climático. Diversas investigaciones señalan que, con el calentamiento global, estos cuerpos de agua en latitudes altas podrían perder su tonalidad única.
En lagos de lugares como Canadá, el norte de Europa o Nueva Zelanda, donde ya se han detectado microalgas, el aumento de la temperatura podría provocar su proliferación incontrolada. El estudio realizado por la Universidad de Carolina del Norte detalla este caso en varios escenarios de calentamiento, y destaca la vulnerabilidad de los lagos azules, advirtiendo sobre la necesidad de tomar medidas preventivas.
Peces y crustáceos en los lagos de los Pirineos
En los Pirineos catalanes, el incremento inicial de la población de peces, impulsado para fomentar la pesca recreativa, alteró el tono del agua. Tras regular la población de peces, los lagos recuperaron su color natural. Este fenómeno evidencia que el aumento de peces conlleva un declive en la población de crustáceos, generando cambios significativos en el ecosistema acuático, y en su coloración.
En ecosistemas similares, como en los lagos de los Alpes, la desaparición de una especie puede transformar radicalmente el equilibrio ambiental, y por tanto la tonalidad del agua. En lagos de alta montaña, la reducción de crustáceos, responsables de filtrar agua y alimentarse de algas, propicia el aumento descontrolado de estas últimas. De ahí la importancia de gestionar equilibradamente las poblaciones para preservar la salud de los ecosistemas acuáticos.
Otros factores que alteran el color de los lagos
Además de los casos que hemos repasado, hay otros factores relacionados con las actividades humanas y los cambios en la precipitación capaces, también, de cambiar el color de estos cuerpos de agua:
- Insecticidas: el evidente incremento en la concentración de contaminantes en los cuerpos de agua, como los lagos, es un fenómeno alarmante. En la actualidad, el uso frecuente de insecticidas, poderosos para exterminar poblaciones de crustáceos en lagos, representa una amenaza muy significativa.
- Ganado: tratamientos antiparasitarios usados habitualmente en el ganado, con la deltametrina, llegan a su torrente sanguíneo. Posteriormente, se eliminan en orina y heces, acabando en el agua de los lagos prácticamente inalterados. Estos compuestos son perjudiciales para diversas especies, especialmente los crustáceos, afectando a la red alimentaria del lago al reducir su población. Y, por tanto, alteran el tono del agua.
- Caudal del agua: hay casos, como el del lago salado Urmia de Irán, que cambió su tonalidad a un rojo intenso. Esto se debe a la variación en su caudal, debido a las precipitaciones y al deshielo en la montaña. La entrada de agua dulce en lagos altera sus características de forma drástica entre los meses de abril y julio.