Balance de enero 2020: días de Gloria

Toda la situación meteorológica de este mes gira en torno a la borrasca con gran impacto Gloria, que la AEMET ha considerado de un “carácter excepcional, tanto por los registros meteorológicos como por los impactos causados”.

El día 17 AEMET emitió el primer aviso por las rachas de viento, lluvia, nieve y fenómenos costeros que iba a producir esta borrasca, que afectó a muchas zonas de la Península y a Baleares, con vientos muy fuertes, rachas incluso huracanadas, que llegaron a los 133 km/h en el puerto de Leitariegos, entre las provincias de Asturias y de León, y precipitaciones muy importantes, con áreas puntuales en el este peninsular que superaron los 400 l/m² o incluso el metro de nieve en cotas relativamente bajas.

Temperaturas entre normales y elevadas

Las máximas solo se han mantenido en un rango que podríamos considerar 'normal' en las islas Canarias, mientras que en la mayoría de las demás regiones han sido superiores a lo normal, destacando un episodio al final del mes que llevó a batir varios registros.

En estaciones de AEMET, el valor más alto mensual se alcanzó el día 30 en La Aldea de San Nicolás, en la isla de Gran Canaria, con 29.1 ºC. En el episodio cálido de los últimos días del mes, concretamente el 31, se igualó la máxima absoluta en el observatorio de Pamplona aeropuerto con 18.6 ºC.

Los valores nocturnos han sido entre normal y superiores a lo normal en la mayoría de las regiones. A mediados de mes, la situación anticiclónica provocó unos pocos días con mínimas relativamente bajas, pero el episodio cálido del final hizo que se batieran varios récords absolutos de mínima más alta, destacando la noche del 31 en Lugo aeropuerto, con 12.6 ºC. Por el contrario, en estaciones de AEMET que no son de alta montaña el valor más bajo mensual se produjo el día 12, en Sigüenza, Guadalajara, con -10.8 ºC.

Precipitaciones abundantes

Nuevamente las precipitaciones en este mes no han sido generalizadas y, desgraciadamente, se han mostrado muy concentradas en el tiempo. En puntos de las provincias de León, Palencia, Burgos, Zamora, Valladolid, Madrid, Toledo y casi todo el archipiélago Canario, han estado por debajo de la media. Mientras que en Galicia, Pirineos, extremos este y suroeste peninsulares y las islas Baleares, las precipitaciones han sido entre muy abundantes e incluso extraordinarias. Por lo que podemos hablar de un mes no bueno desde el punto de vista del aporte hídrico.

Dos episodios han afectado a la zona de Galicia, uno entre los días 13 y 17 y el otro a finales de mes, con aportes, en su parte más occidental, que han superado los 300 l/m². Las estaciones de Mazaricos y de Vimianzo, en el suroeste de la provincia de La Coruña, están en zonas que se aproximan a los 2.000 l/m² desde el inicio del año agrícola o hidrometeorológico, el pasado 1 de septiembre de 2019.

En el resto de áreas con grandes precipitaciones el período principal corresponde con los días 18 al 25. En el tercio oriental peninsular hay comarcas que han superado los 450 l/m², provincias de Gerona y de Valencia; en las Baleares los 250 l/m² y en el suroeste de la Península, cerca de los 200 l/m² en áreas de las provincias de Cádiz y Málaga, destacando en esta última la tormenta con granizo del día 23, que vistió las calles de esta ciudad de un manto blanco de varios centímetros de espesor.

Esta situación tan excepcional ha batido numerosos registros históricos, destacando los récords absolutos de precipitación recogida en un día en los observatorios principales de Tortosa, en Tarragona, con 137 l/m² o de Daroca, Zaragoza, con 59,8 l/m², que casi duplica su valor anterior, que databa de 1951.

Consideraciones finales

El agua embalsada en nuestros pantanos está en el 57,40% de su capacidad máxima, con una ganancia mensual ligeramente superior al 1%. No obstante, estamos un 5% por debajo de la media de los últimos 10 años en el agua embalsada en España y retrocedemos en un 3% la misma semana del año pasado.

En condiciones normales de circulación general atmosférica nos quedarían pocas semanas para terminar el período de bloqueo anticiclónico de invierno, por tanto, estamos en un momento relativamente seco en muchas de las comarcas españolas. Nuestras reservas de agua aún se encuentran por debajo de la media y también son inferiores al año pasado, más bien seco, por lo que no podemos confiarnos porque el peligro de la sequía todavía no ha finalizado.