La sorprendente procedencia del asteroide que ronda la Tierra
Kamo'oalewa es un cuasi satélite de unos 40 metros de diámetro, y se considera un compañero constante de nuestro planeta. Ahora se teoriza sobre su origen, ¿quizás la Luna?
Kamo'oalewa es un cuasi satélite, una subcategoría de asteroides cercanos a la Tierra que orbitan alrededor del Sol pero que permanecen relativamente próximos a nuestro planeta. Según un nuevo estudio, publicado en la revista Earth and Environment, podría ser sorpresivamente un fragmento de la Luna.
Kamo'oalewa (2016 HO3) fue descubierto por el telescopio PanSTARRS en Hawái en 2016, y el nombre, que procede de un canto de origen hawaiano, alude a un fragmento separado o perdido. El asteroide tiene unos 40 metros de diámetro y se acerca a unos 14 millones de kilómetros de la Tierra. Se trata probablemente del cuasi-satélite más estable de la Tierra. El asteroide tiene una órbita alrededor del Sol que lo mantiene como un constante compañero de nuestro planeta.
Los misterios de los cuasisatélites
Se sabe poco sobre estos objetos porque son difíciles de observar. Un cuasisatélite de un planeta completa una órbita alrededor de su estrella en el mismo tiempo en que lo hace el propio planeta, pero describiendo una órbita de distinta excentricidad.
A diferencia de los verdaderos satélites, en nuestro caso la Luna, los cuasisatélites orbitan fuera de la esfera de Hill del planeta, que es la zona en la que la fuerza gravitatoria de este domina sobre las fuerzas gravitatorias de otros cuerpos celestes. A consecuencia de ello, en el caso de los cuasisatélites, las perturbaciones gravitatorias externas pueden ser susceptibles de alterar la órbita del objeto, pudiendo, llegado el caso, desvincularlo de la resonancia planetaria.
¿Qué encontró el nuevo estudio?
El nuevo trabajo, llevado a cabo por un equipo de científicos liderado por el investigador de la Universidad de Arizona Benjamin Sharkey, concluye que Kamo'oalewa podría estar compuesto de material similar a la Luna y que su formación podría deberse a un antiguo impacto de un objeto con nuestro satélite.
Para llegar a esta conclusión, el equipo examinó la luz reflejada de Kamo'oalewa utilizando el Gran Telescopio Binocular, parte del Observatorio Internacional del Monte Graham, en Arizona, y el Telescopio Lowell Discovery del Observatorio Jodrell Bank, situado al noreste de Inglaterra. Así, los autores encontraron que tenía un espectro de reflectancia roja, muy similar al de los minerales de la superficie de la Luna.
"Este espectro es indicativo de una composición a base de silicato, pero con un enrojecimiento más allá de lo que se ve típicamente entre los asteroides del sistema solar interior", explicó Sharkey. "Comparamos el espectro con el de varios materiales análogos y llegamos a la conclusión de que las mayores coincidencias son con silicatos de tipo lunar", continuó. "Una interpretación que implica una gran erosión espacial y que plantea la posibilidad de que Kamo'oalewa pueda contener material de la Luna", concluyó.