Así se prepara Europa para la excepcional ola de frío

Entre el domingo y el lunes una inmensa masa de aire polar continental ganará terreno por la mayor parte de Europa. Las temperaturas mínimas caerán hasta los -20ºC en Alemania. 

Carámbano
El hielo tomará la mayor parte de Europa la semana que viene.

Hace unos días el Calentamiento Súbito Estratosférico (CSE) entró en escena y, desde entonces, el escenario meteorológico está virando hacia una situación retrógrada. El próximo lunes el viento llegará al centro y al oeste del continente europeo desde las entrañas de Rusia. Éste arrastrará una masa de aire polar continental, una Siberiana, que sumirá a los países de Polonia, Alemania, Italia o Francia en el hielo.

Hoy Meteo France ya presenta en su página web un extenso análisis sobre el envite siberiano, que trazará el típico pasillo Moscú-París. El aire gélido se quedará en terreno galo unas cuantas jornadas, entre el lunes y los primeros días de marzo. En los valles interiores las temperaturas mínimas se desplomarán hasta los -10ºC y las máximas cercarán la marca de 0ºC, o la superarán por poco. Según los meteorólogos franceses, estos registros son excepcionales por las fechas en las que llegan. Entre diciembre y mediados de febrero la insolación es menor y las olas de frío suelen deparar temperaturas diurnas negativas. Ahora, con el sol anclado en el cielo hasta la media tarde, es más difícil que esto ocurra, pero pasará.

El Ministerio de Interior francés ya está gestionando la apertura de sitios de acogida para que nadie se quede sin techo la semana que viene. Se ha activado el plan “Gran Froid” en 29 departamentos. La última vez que llegó a Francia una ola de frío tardía fue en 2005. Por aquel entonces marzo batió récords con registros mínimos de hasta -15ºC en Romorantin, -13ºC en Poitiers y -12ºC en Bergerac.

Las nevadas, salvo casos aislados, no serán copiosas. La masa de aire será eminentemente seca.

En Alemania, el Servicio Meteorológico Nacional (DWD) esta mañana ha representado la llegada de la ola de frío con un gráfico en redes sociales. En la tabla se aprecia el desplome de temperaturas previsto en las ciudades de Frankfurt, Berlín y Stuttgart, que no superarán los -5ºC en tres días. Además, avisa que estos registros llegarán con rachas moderadas o fuertes de viento que aumentarán la sensación de frío. Muchos observatorios alemanes bajarán por la noche de los -15ºC, y algunos rozarán los -20ºC. El “latigazo ruso”, así ha sido bautizado el envite por el tabloide Bild, al menos deparará grandes claros por ser eminentemente seco. Los alemanes no tienen otro consuelo.

En Polonia los medios de comunicación también dejan entrever la inminente llegada del descenso de temperaturas. En los valles del noreste del país y en zonas de monaña se esperan temperaturas mínimas de hasta -18ºC. En Italia los registros más bajos quedarán relegados al valle del Po, con valores de hasta -14ºC. Por allí los medios tildan al episodio de “complejo” y “explosivo”. Los italianos no tenían una ola de frío de esta envergadura en los prolegómenos de marzo desde 2012, y la anterior data de 1985.

La Península Ibérica y el archipiélago balear, según los modelos de predicción más fiables, quedarán algo al margen del grueso del aire polar. Sin embargo, esta tarde están proliferando algunos mapas que sí extienden la siberiana hasta la mitad norte. No hay que bajar la guardia. La aparición de una pequeña borrasca en el Mediterráneo bastaría para cambiar el escenario.